Por revistaeyn.com
En una conferencia de prensa, brindada por la delegación de funcionarios estadounidenses que visitaron Guatemala por la toma de posesión de Bernardo Arévalo, Brian Nichols, subsecretario de Estado de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, habló sobre las acciones que puede tomar su país en contra de aquellos personajes que atenten contra la democracia de Guatemala.
Expresó que "Estados Unidos usa las herramientas que tiene para defender la democracia" y que están dispuestos a seguir usándolas. Entre ellas la Ley Global Magnitsky, Lista Engel y suspensión de visas, todo con el fin de promover la lucha contra la corrupción y el respeto a la democracia.
"Nuestro propósito es promover el respeto a la democracia y el combate a la corrupción", agregó.
Sin embargo, envió un mensaje a todos los funcionarios afectados por las diversas medidas migratorias-políticas en las últimas semanas, "los que cambien de actitud pueden recuperar sus derechos de visa".
Desde 2021, el gobierno de Estados Unidos ha sancionado a 11 personas y entidades en Guatemala por su papel en la corrupción bajo la ley Magnitsky, a otro buen grupo con la Lista Engel y el Departamento de Estado también ha utilizado una serie de herramientas de restricción de visas para promover la rendición de cuentas de actores corruptos y antidemocráticos en Guatemala.
Alejandro Giammattei, aún en su posición de presidente, criticó este accionar por parte de Estados Unidos ante la Organización de Estados Americanos (OEA), indicando que “un gobierno (...) de manera unilateral y sin permitir la posibilidad de defensa ante los señalamientos en su contra, se atrevió a suspender la visa a más de 100 diputados del Congreso de la República, simplemente porque cumplieron con su deber”.
Este hecho anunciado es relacionado a las acciones de Washington que sancionó “por socavar la democracia y el estado de derecho” a los diputados.
Por su parte, Samantha Power, directora de Usaid, manifestó que cuando un gobierno ataca la corrupción, la cooperación tiene mayores alcances. Por lo cual resaltó las buenas relaciones que se esperan, tengan con la administración de Bernardo Arévalo.
En este sentido, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, aseguró, por medio de un comunicado de prensa, que "Estados Unidos seguirá apoyando nuestros valores democráticos compartidos".
"Espero con interés recibir al presidente Arévalo en Washington en los próximos meses para fortalecer la relación entre Estados Unidos y Guatemala y para progresar más en abordar las causas fundamentales de la migración. A medida que nuestra administración sigue ejecutando la estrategia de las Causas Fundamentales, espero trabajar con el presidente Arévalo en seguridad civil, buena gobernanza, derechos humanos y protección laboral, violencia de género y oportunidades económicas", agregó.
EL CASO DEL HIJO DE GIAMMATTEI
Cuando fue consultado sobre si se le retiró la visa estadounidense a uno de los hijos del expresidente Alejandro Giammattei, se limitó a responder "que los casos de visa son privados, no se revela la situación de visa de las personas".
En las primeras horas de este 15 de enero de 2024 se dio a conocer que Alejandro Giammattei Cáceres, hijo del expresidente, fue deportado desde Miami, Estados Unidos, hacia Guatemala.
El senador estadounidense Mike Lee fue quien usó sus redes sociales para compartir detalles sobre este suceso.
- Una relación muy diferente -
De manera opuesta a las relaciones tensas que mantuvieron con la comunidad internacional los últimos gobiernos, analistas estiman que Arévalo debe aprovechar el respaldo externo para impulsar su plan de cambiar el país.
Samantha Power anunció en Guatemala una inversión de 219 millones de dólares en programas de desarrollo este año.
"Guatemala va a regresar de lleno al concierto de naciones, porque desde los últimos tres gobiernos habíamos estado tomado distancia", la relación fue "cortante y hostil", dijo a la AFP la directora del grupo ProJusticia, Carmen Aída Ibarra.
Para Ibarra "es lógico" que la comunidad internacional esté "apoyando a un gobierno que está comprometido con la democracia y respeto a los derechos humanos".
Los últimos dos gobiernos mantuvieron un discurso "soberanista y oportunista que era simplemente para decir 'déjennos hacer lo que nos dé la gana'", coincidió Linares.
Arévalo prometió trabajar por recuperar las instituciones del país carcomidas por la corrupción para que trabajen por desarrollar los proyectos de educación, salud, vivienda, en un país con 60% de sus 17,8 millones de habitantes en pobreza.
Pero el trabajo no será fácil pues persiste "mucha tensión entre el presidente y la fiscal general", según Linares. "Los aliados con la corrupción y la impunidad siguen manteniendo el control en el sistema de justicia", advirtió.
