La chispa de la vida es la elección primaria de los hogares centroamericanos a la hora de hacer la compra, con una penetración del 95 % en las casas del Istmo, y mayor frecuencia que sus competidoras; siendo líder absoluto en la región y número 1 en Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Panamá.
Tan solo Dos Pinos, en Costa Rica, se atreve a cuestionarle la corona a Coca-Cola, donde el 99 % de los hogares tienen al menos un producto de la cooperativa.
El Brand Footprint mide el grado de conexión real entre una marca y sus consumidores, con información basada en el comportamiento real de consumo. Los Consumer Reach Points (CRPs) forman la base del ranking, midiendo cuántos compran una marca (penetración) y qué tan seguido (frecuencia), proveyendo una representación real de la decisión del comprador.
En el estudio se comprueba que, cada vez más, los consumidores centroamericanos (acorde a una tendencia mundial) apuestan por marcas locales, ya que suponen el 62 % de la elección (64 % en el mundo, 53 % en América Latina) de la canasta.
"Centroamérica es más nacionalista, apoya más la industria nacional. Por confianza y porque les da mucha seguridad por la calidad de los productos, para el centroamericano es importante a la hora de la elección de las marcas", arguye Rebeca Vargas, coordinadora de Comunicación y Marketing de Kantar Worldpanel para Costa Rica.
Si bien "siempre hemos asumido que globales son más Premium o caras", las locales ya están cerrando esa brecha de percepción, equiparando su precio, comenta Vargas.
Las categorías que más pesan en la cesta centroamericana son alimentos (39 %), cuidado personal (20 %), bebidas (17 %), lácteos (17 %) y cuidado del hogar (7 %).
El gasto de los hogares del Istmo en la canasta de la compra subió un 4 % en el primer trimestre de 2017, respecto a un año atrás, por el 3 % a nivel mundial, y el 9 % de América Latina (esto, explicado por la fuerte inflación en Argentina, que supuso una canasta un 27 % más cara, sin que ello conllevara una mayor compra).