La frecuencia de compra del consumidor centroamericano está sufriendo una variación, según ha revelado el estudio de Kantar Worldpanel, al estimar que la frecuencia de compra ha aumentado un 10%, respecto al año pasado; mientras que el desembolso en cada compra ha bajado un 8%.
"Ya no se hace una gran compra quincenal o mensual", explicó la directora comercial de Kantar, Emma Ortiz, quien apunta que el consumidor es ahora más precavido en el gasto y cubre sus necesidades básicas.
En la actualidad, cada hogar centroamericano va a comprar 211,3 veces por año.
Esto puede ser debido al temor a una crisis financiera, ya que en Centroamérica así lo sienten el 55% de salvadoreños, 44% de nicaragüenses, 42% de los costarricenses, 37% de guatemaltecos, 33% de hondureños y 31% de panameños.
La mayor parte del dinero de la canasta va a la parte de alimentación (42%), seguido de bebidas (20%), cuidado de la casa (16%), cuidado personal (12%) y productos lácteos (10%).
Los canales tradicionales siguen siendo los lugares a los que los centroamericanos nos decantamos a la hora de ir a hacer compras, seguido de supermercados e hipermercados.
Otro descubrimiento significativo de la muestra es que cada vez compramos más en presentaciones pequeñas; y que los productos accesibles son transversales a toda clase social, así como que no son exclusivos de marcas de precio bajo, y se pueden encontrar en cualquier tipo de canal.