Los grandes magnates del universo tecnológico se encuentran entre las personas más ricas del planeta. Y tienen dinero más que de sobra para gastarlo en adquisiciones extravagantes.
Algunos de estos ricos, como Bill Gates (Microsoft) o Mark Zuckerberg (Facebook) destinan gran parte de sus fortunas a la filantropía, pero otros prefieren priorizar sus caprichoso más lujosos.
Los grandes derroches de los multimillonarios de la industria tecnológica incluyen extravagantes caprichos en materia de transporte: desde súper yates y jets privados hasta colecciones de automóviles personalizados.
El patrimonio inmobiliario de esta elite salida en su mayor parte de Silicon Valley se compone de gigantescas mansiones, pero además varios de ellos tienen sus propios ranchos privados e incluso islas paradisíacas.
El fundador de Amazon, Jeff Bezos, se gastó US$65 millones en un jet privado.
El fundador de Amazon, Jeff Bezos, se gastó US$65 millones en un Gulfstream G650ER, un jet privado con capacidad para ocho personas.
Elon Musk, fundador de Tesla y SpaceX, se gastó US$70 millones en su propio avión privado
El Gulfstream G650ER de Elon Musk fue noticia después de que Tesla pagase US$700.000 para costear los gastos de transporte tras recorrer 200.000 kilómetros en un año.
Musk también se ha dado el gusto de construir una impresionante cartera inmobiliaria
Una de las residencias de Elon Musk, una propiedad de Bel Air de US$17 millones, incluye una biblioteca de dos plantas y una bodega de vino con 1.000 botellas.
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Otros magnates de la industria tecnológica también son famosos por sus impresionantes viviendas, incluyendo el 'Castillo' de Michael Dell en Texas y el Xanadu 2.0 de Bill Gates en Medina, Washington.
Musk suele conducir uno de los coches más asequibles de su compañía. Sin embargo, se gastó una fortuna en hacerse con un vehículo submarino como el de James Bond.
Elon Musk se gastó cerca de US$100.000 en una subasta en Londres para comprar el Lotus Esprit de 1976. El coche submarino apareció en la película de James Bond de 1977 La espía que me amó. Además de esta compra, el CEO de Tesla también posee un Ford Modelo T y otros vehículos de colección.
Los aviones del multimillonario Larry Ellison son algo atípicos: son de combate militares.
El fundador de Oracle, Larry Ellison, posee un MiG-29 soviético y un avión de la fuerza aérea italiana, llamado SIAI-Marchetti S.211.
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Tiene su propio equipo de regatas y varios yates
El actual yate de Larry Ellison se llama Musashi, y tiene 380 metros de eslora. Anteriormente poseía un yate mucho más grande, de 600 metros de eslora, llamado Rising Sun. Se dice que Ellison vendió esa embarcación por US$300 millones.
Es dueño de una isla hawaiana
Larry Ellison pagó 'unos US$600 millones por el 98% de Lana'i'. El magnate de Oracle también tiene otras propiedades de lujo tanto en Japón como en Silicon Valley.
Bill Gates también es dueño de un jet privado
A diferencia del avión de Jeff Bezos, que únicamente tiene capacidad para 8 personas, el avión de US$40 millones de Bill Gates tiene capacidad para 19 pasajeros.
También colecciona deportivos de lujo
La colección de deportivos de Bill Gates, con un valor estimado de US$650.000, incluye un Jaguar XJ6 y un Ferrari 348. También tiene varios Porsches: un Porsche 911, un Porsche Carrera Cabriolet 964, y un Porsche 959 Coupe de 1988.
Gates se gastó US$36 millones en un cuadro de Winslow Homer y US$30 millones en un manuscrito de Leonardo da Vinci
Ambos objetos históricos se conservan en la mansión de Gates en Washington, conocida como Xanadu 2.0. Gates compró la pintura de Homer en 1988, y compró el manuscrito de Leonardo da Vinci seis años después. El valioso documento del siglo XVI se conserva en la biblioteca de su mansión de 3.200 metros cuadrados.
Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, posee un deportivo de US$1,3 millones, además de otros vehículos
A Zuckerberg, al igual que a Bill Gates, se le ha podido ver conduciendo algunos vehículos asequibles como el Honda Fit o el Volkswagen Golf GTI, ambos en torno a los US$30.000.
Sin embargo, el garaje de Zuckerberg esconde un automóvil de lujo: un deportivo italiano llamado Pagani Huayra que vale aproximadamente US$1,3 millones.
