En su primer decreto como presidente de la República, Rodrigo Chaves Robles eliminó el uso obligatorio de la mascarilla para la población, así como la obligación de vacunarse contra la covid-19.
Además, la negativa a vacunarse ya no será causal de despido en el sector público.
El uso estricto de la mascarilla y de la vacunación solo queda vigente para los trabajadores de la primera línea de atención de la salud pública. Para las demás personas, el uso es voluntario, dijo el mandatario.
“El resto de las personas podrá escoger si quieren protegerse con vacunación o no”, continuó. La mascarilla no será necesaria ni siquiera en los buses, según la declaración del presidente:
“El decreto lo que quiere es darle la libertad y la responsabilidad a las y los costarricenses por su propia salud. Los únicos que no podemos permitir que ejerzan el juicio de si quieren usar o no mascarilla, porque el decreto no prohíbe la mascarilla..., las únicas que están obligados a usar mascarilla son las personas que atienden en el sistema de salud a, por ejemplo, alguien que tiene un sistema inmunológico debilitado y a quien por justicia y equidad no podemos exponer a alguien que tenga el virus.
“Al resto de personas, yo les recomiendo que se pongan la mascarilla en el bus si así lo sienten, sobre todo los que no se han vacunado tres o cuatro veces. Eso es sentido común, los ticos somos gente inteligente y las ticas más. Yo hago un llamado de que esto es una oportunidad, respeto a la población, y si viene una ola de covid reevaluaremos”.
