Mujeres Desafiantes

Andrea Monzón, motor de acción para el comercio de Centroamérica

Como Secretaria General del Capítulo Guatemala de la Cámara de Comercio Internacional (ICC por sus siglas en inglés). Lidera distintos departamentos y proyectos de la organización.

2022-05-16

Por Redacción E&N

Mientras sus compañeros en la escuela dibujaban su futuro con trajes de astronautas, cascos de bomberos o batas de doctores, ella delineaba su futura ‘yo’ con traje de sastre, portafolio y un edificio corporativo a sus espaldas. Como Secretaria General de ICC Guatemala, lidera distintos departamentos y proyectos de la organización. Su día a día nunca es igual. “Como en la vida de todo gerente, los días son muy diversos. Algunos días son de planificación y administración y otros días son de atención de la crisis o problemáticas que puedan surgir de improviso”, comenta.

“Siempre tuve muy claro lo que quería llegar a ser”, dice a E&N Andrea Monzón, la guatemalteca que ostenta el cargo de Secretaria General de la Cámara de Comercio Internacional (ICC, por sus siglas en inglés).

Sus primeros pasos los dio como técnico de análisis de la Cámara de Industria de Guatemala, tras graduarse en Administración de Empresas, lo que le permitió confirmar su amor por el mundo institucional.

En el 2015, logró afianzar su carrera profesional al estudiar un Magíster en Administración en la Universidad Católica del Norte, en Chile, programa del cual se gradúo en 2017.

Luego en 2018, tuvo la oportunidad de dirigir una consultora de comunicación y asuntos públicos en Centroamérica, Europa y las Américas, lo que le permitió ampliar su visión del mundo e interactuar con clientes a nivel mundial.Pero no paró allí.

En septiembre 2021, decidió asumir un nuevo reto como Secretaria General de ICC Guatemala. ICC representa la organización mundial de las empresas, con sede en París, Francia y con representación en más de 100 países.

“Cuando uno trabaja para una organización empresarial, se tiene la oportunidad de impulsar proyectos que mueven la aguja para un país y una región. Poder aportar para generar programas e iniciativas que crean empleo, que aportan a la construcción de un mejor clima de negocios y que atraen inversión a los países representa una satisfacción impresionante. Me mueve impulsar cambios positivos para Guatemala y Centroamérica desde el ámbito empresarial”, afirma.

Monzón tiene 33 años, es soltera, aunque en el futuro aspira a formar su propia familia. Ama escribir, viajar y conocer nuevas culturas. Estar en un museo es para ella “la felicidad” porque le encanta el arte y la historia, según refiere.

¿Qué significa para usted ser Secretaria General de ICC Guatemala?

Para mí ha sido un desafío, pero sobre todo ha representado una gran motivación. Cuando uno trabaja por proyectos país y por proyectos en beneficio de múltiples sectores, existe un motor interno que motiva a hacer más. Este año, desde ICC Guatemala y Cámara de Industria de Guatemala, se ha trabajado en un proyecto que me inspira muchísimo, GuateÍntegra.

Este es un programa que promueve una cultura de legalidad e integridad en todos los ámbitos, contando con programas para niños, jóvenes, empresas y sector público. Desde este programa, se ha desarrollado una plataforma de aprendizaje totalmente digital para fomentar un actuar ético y transparente en las organizaciones.

Otro gran proyecto que estamos trabajando desde ICC Guatemala es la atracción de inversión a la región. Contribuimos con el Partnership for Central America, una colaboración público-privada que tiene como propósito movilizar y coordinar inversiones en el Triángulo Norte, en conjunto con el Departamento de Estado de Estados Unidos y la Casa Blanca. Este tipo de proyectos que buscan generar oportunidades de inversión y empleo para los centroamericanos son sin duda motores del desarrollo.

¿Específicamente cuál es su rol como Secretaria General de ICC Guatemala?

Mi rol es poder articular esfuerzos a nivel interno y externo para atender esas necesidades. De igual forma, debo velar por la retención de los miembros y la atracción de nuevas empresas. Finalmente, y la parte que más disfruto, es poder desarrollar proyectos en beneficio de múltiples sectores y del país. ICC cuenta con comisiones de anticorrupción, facilitación del comercio, sostenibilidad, propiedad intelectual, entre otros.

¿Qué tipo de decisiones debe tomar?

En los días de planificación, se toman decisiones sobre los próximos pasos de la organización, de sus comisiones y de los proyectos institucionales.

¿Qué podemos hacer para promoverlos?¿Cómo podemos incrementar la participación de los miembros en las actividades?, ¿cómo podemos posicionarnos externamente ante nuestros grupos de interés? En los días de problemáticas imprevistas, se necesitan decisiones ágiles y acciones de negociación con los públicos. Es esa dinámica tan variada lo que me encanta del día a día.

¿Qué tipo de retos enfrenta?

Ser una mujer joven en un puesto de liderazgo tiene sus retos ya que, con frecuencia, cuando las personas externas aún no me conocen, tienden a poner a prueba mi trabajo y mis habilidades de liderazgo. Al interactuar y trabajar juntos con otros colegas, esas dudas iniciales se disipan y la colaboración fluye de mejor manera.

Es muy importante generar una cultura en la sociedad en la que la capacidad no se juzgue a primera vista por la edad o por ser mujer.Por otra parte, como líder de una organización empresarial como ICC Guatemala, siempre existe el reto de visibilizar el valor de este tipo de entidades con sus asociados. Muchas veces el resultado del trabajo es intangible o de largo plazo y no se puede comunicar de inmediato el logro. Sin embargo, es la constancia de trabajar por alcanzar una visión lo que tiene el impacto a futuro.

¿Cómo se levanta de las frustraciones cotidianas?

Siempre he sido una persona automotivada y que busca soluciones a los problemas. Mi mamá, la mujer que más admiro y una gran profesional, me decía desde niña: “Si no funcionó el plan A, hay que seguir con el plan B y con el plan C...” Esto me enseñó a no darme por vencida ante la adversidad.

Otro gran motivador cotidiano es saber que trabajo por la construcción de un mejor país y una mejor región. Cuando uno sabe que el esfuerzo se traduce en resultados que aportarán a miles de empresas y personas, uno se mentaliza que vale la pena y está dispuesto a dar la milla extra, con una sonrisa en el rostro.

Un aprendizaje muy importante para hacerle frente a las frustraciones cotidianas es afrontar un problema a la vez. Pensar en múltiples problemas puede llegar a abrumar.

¿Qué le inspira?

Me inspira trabajar por cambios de fondo y de largo plazo. Cuando uno trabaja para una organización empresarial, se tiene la oportunidad de impulsar proyectos que mueven la aguja para un país y una región. Poder aportar para generar programas e iniciativas que generan empleo, que aportan a la construcción de un mejor clima de negocios y que atraen inversión a los países representa una satisfacción impresionante. Me mueve impulsar cambios positivos para Guatemala y Centroamérica desde el ámbito empresarial. Soy una persona que cree firmemente que la integridad, el trabajo en equipo y el esfuerzo son tres factores clave para el liderazgo.

¿A su juicio cuál es su aporte a esta entidad?

Lidero un equipo de trabajo conformado en su mayoría por mujeres y me llena de orgullo y satisfacción ver cómo crecen profesionalmente a lo largo del tiempo. Es vital motivarlas a animarse a asumir nuevos retos, a tomar espacios de liderazgo y a prepararse académicamente. Hay que darles un espacio en la mesa a las jóvenes para que vean que sí pueden. Hay una frase que me encanta y es “si no te dan un lugar en la mesa, trae una silla plegable”. Creo que esto aplica perfectamente.La alta ejecutiva además trata de tener un balance en su vida profesional y familiar.“Los fines de semana y los momentos en familia entre semana sirven para recargar energía. Compartir tiempo de calidad con la familia, pareja y amigos es necesario para tener una vida balanceada, sana y plena”, destaca.

¿Cuáles son sus metas?

Como metas de corto y mediano plazo a nivel laboral, quiero impulsar varios proyectos de las comisiones de trabajo de ICC, sobre todo aquellos enfocados en la promoción de una cultura de integridad en el ámbito empresarial.También quiero continuar desarrollando programas de apoyo al emprendimiento y fortalecimiento de las pequeñas y medianas empresas.

Como Secretaria General de ICC Guatemala, quiero involucrarme más en las comisiones mundiales de ICC, para poder tener una visión mucho más internacional de cada uno de los temas. A nivel personal, quiero darle vida a un proyecto educativo enfocado en el empoderamiento de las niñas. Espero poder próximamente contarles de esta iniciativa que me genera mucho entusiasmo.

¿Cuál es el mensaje para las niñas?

Mi gran mensaje es que se atrevan a soñar y que acompañen ese sueño de acciones concretas que las acerquen cada vez más a esa meta. Invito a todas las niñas a ser perseverantes y no dejar que un no (o múltiples no) las desanimen. Una amiga mentora una vez me dijo: “Hay 100 formas de encontrar el cómo no, pero hay que siempre buscar el cómo sí”.

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