Por Leonel Ibarra - revistaeyn.com
La región de Centroamérica tendría un crecimiento económico promedio de entre 3,9 % y 3,8 % en 2024 y 2025, lo que representa una disminución comparada con el 4,2 % alcanzado en 2023, indican las perspectivas del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sin embargo, esto sería superior al 2 % promedio proyectado para América Latina para este año y luego subiría a 2,5 % en 2025.
"El pronóstico base es que la economía mundial continúe creciendo a un ritmo de 3,2 % durante 2024 y 2025, al mismo ritmo que en 2023. Una leve aceleración en las economías avanzadas, donde se espera que el crecimiento aumente del 1,6 % en 2023 al 1,7 % en 2024 y al 1,8 % en 2025, se verá compensada por una modesta desaceleración de las economías de mercados emergentes y en desarrollo, del 4,3 % en 2023 al 4,2 % tanto en 2024 como en 2025. El pronóstico de crecimiento mundial para dentro de cinco años, del 3,1 %, está en su nivel más bajo en décadas", indica el FMI.
LOS PRONÓSTICOS PARA CADA PAÍS DE CENTROAMÉRICA
Por países, el crecimiento de la región estará liderado por Costa Rica con 4 % para este año y luego bajaría a 3,5 % en 2025 y 3,3 % en 2029.
Luego se ubica Honduras con una proyección de crecimiento económico de 3,6 % y luego seguirá una leve tendencia al alza de 3,7 % y 3,9 %.
Guatemala tendría un crecimiento de su producto interno bruto (PIB) en 2024, 2025 y 2029 de 3,5 %, 3,7 % y 3,9 %, respectivamente.
Por su parte, Nicaragua se estima que crecería en 2024, 2025 y 2029 un 3,5 %, muy en sintonía con las proyecciones oficiales hechas recientemente.
"Las condiciones domésticas y externas permanecen propicias para que la economía crezca en 2024 conforme lo esperado. Así, el mercado laboral continúa estable, con una baja tasa de desempleo, la inflación nacional muestra una desaceleración gradual inducida en parte por la reducción de las presiones externas, continua el dinamismo de la intermediación financiera con los depósitos y el crédito creciendo a tasas de dos dígitos,", señala un reporte del Banco Central de Nicaragua.
En cuanto a El Salvador, tendría un crecimiento de 3 % este año, para luego bajar y estancarse en 2,3 % como ha sido su promedio histórico. Para 2024 el Banco Central de Reserva proyecta un crecimiento económico entre 3 % a 3,5 %, impulsado por la inversión pública y privada, el turismo y un ambiente de seguridad, así también por la recuperación de la demanda externa que favorecerá a las exportaciones.
Panamá, que fue en su momento la estrella de la región con un crecimiento del PIB del 7,3 % en 2023, el FMI proyecta que caerá a 2,5 % este año para luego recuperarse a 3 % y 4 %.
El reporte señala que los países de la región centroamericana pasarán de un nivel promedio del índice de precios al consumidor de 4,1 % en 2023 a 3 % y 3,3 % en 2024 y 2025, respectivamente.
El FMI destaca que los riesgos para las perspectivas mundiales están ahora ampliamente equilibrados. En el lado negativo, las nuevas subidas de precios derivadas de las tensiones geopolíticas, incluidas las de la guerra en Ucrania y el conflicto en Gaza e Israel, podrían, junto con la persistente inflación subyacente donde los mercados laborales siguen siendo ajustados, elevar las expectativas de tipos de interés y reducir los precios de los activos.
"Una divergencia en las velocidades de desinflación entre las principales economías también podría causar movimientos monetarios que presionen a los sectores financieros. Los altos tipos de interés podrían tener efectos de enfriamiento mayores de lo previsto, ya que las hipotecas a tipo fijo se restablecen y los hogares se enfrentan a una elevada deuda, lo que provoca tensiones financieras", indica el reporte.
