Por eyn.net
Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana suscribieron el Acuerdo de Escazú, el cual ofrece a los países y sociedades, una plataforma para avanzar hacia el acceso pleno a la información, a la participación más allá de la consulta y a la justicia ambiental.
En el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas se firmó el "Acuerdo de Escazú". Este tratado destaca en importancia ya que contiene un artículo, que ningún otro tratado anterior ha incluido específicamente, que es la protección de los defensores de derechos humanos en asuntos ambientales.
El Acuerdo de Escazú busca asegurar que todas las personas tengan acceso a información oportuna y confiable, puedan participar de manera efectiva en las decisiones que afectan sus vidas y su entorno y accedan a la justicia en asuntos ambientales, contribuyendo así al cumplimiento de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
"Este acuerdo era necesario. La democracia no tiene que ver solamente con la participación, sino también con qué hacemos nosotros con nuestros recursos, cómo nos miramos hacia el futuro. Invito a los países que no han firmado para que lo hagan en el menor plazo posible, para que muy pronto, cuando tengamos ya las ratificaciones correspondientes, el Acuerdo de Escazú ya esté vigente como un paso sustantivo en la democracia de la región", indicó la Vicepresidenta de Costa Rica, Epsy Campbell.
"Y es que la región tiene buenas razones para sentirse orgullosa de este instrumento: además de ser el único tratado emanado de Rio+20, en el primer tratado regional ambiental de América Latina y el Caribe y el único de su tipo en contener disposiciones específicas para la promoción y protección de los defensores de derechos humanos en asuntos ambientales" aseguró la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.
El acuerdo fue firmado por: Antigua y Barbuda, Argentina, Brasil, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Guyana, Haití, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Santa Lucía y Uruguay.
Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana suscribieron el Acuerdo de Escazú, el cual ofrece a los países y sociedades, una plataforma para avanzar hacia el acceso pleno a la información, a la participación más allá de la consulta y a la justicia ambiental.
En el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas se firmó el "Acuerdo de Escazú". Este tratado destaca en importancia ya que contiene un artículo, que ningún otro tratado anterior ha incluido específicamente, que es la protección de los defensores de derechos humanos en asuntos ambientales.
El Acuerdo de Escazú busca asegurar que todas las personas tengan acceso a información oportuna y confiable, puedan participar de manera efectiva en las decisiones que afectan sus vidas y su entorno y accedan a la justicia en asuntos ambientales, contribuyendo así al cumplimiento de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
"Este acuerdo era necesario. La democracia no tiene que ver solamente con la participación, sino también con qué hacemos nosotros con nuestros recursos, cómo nos miramos hacia el futuro. Invito a los países que no han firmado para que lo hagan en el menor plazo posible, para que muy pronto, cuando tengamos ya las ratificaciones correspondientes, el Acuerdo de Escazú ya esté vigente como un paso sustantivo en la democracia de la región", indicó la Vicepresidenta de Costa Rica, Epsy Campbell.
"Y es que la región tiene buenas razones para sentirse orgullosa de este instrumento: además de ser el único tratado emanado de Rio+20, en el primer tratado regional ambiental de América Latina y el Caribe y el único de su tipo en contener disposiciones específicas para la promoción y protección de los defensores de derechos humanos en asuntos ambientales" aseguró la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.
El acuerdo fue firmado por: Antigua y Barbuda, Argentina, Brasil, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Guyana, Haití, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Santa Lucía y Uruguay.
