Entre las modificaciones se incluyó la prohibición de calificación a las personas que traten de simular cambio de nombre o razón social para mantener los beneficios fiscales.
También se limitaron esos beneficios, que serán exclusivamente de la industria de vestuario y textiles y a las que brindan servicios vinculados a las tecnologías de información y comunicación, que en la actualidad ofrecen los centros de llamadas o de contacto.
El presidente de la Comisión de Economía, Arístides Crespo, dijo que lo que se buscó fue favorecer las dos actividades y que no haya más sectores agregados. Asimismo, que no se pierdan más de 100.000 empleos que se generan en esas industrias.
Al razonar su voto, el diputado álvaro Velásquez expresó que era inconstitucional apoyar a un sector específico, pues le podría generar problemas al país ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Si bien el presidente de la Comisión de Trabajo, Ovidio Monzón, afirmó ayer que el dictamen había sido enviado a la Dirección Legislativa, en ese departamento, al cierre de esta edición, negaron haberlo recibido.
Los ministerios de Finanzas y Economía y a la Superintendencia de Administración Tributaria manifestaron su acuerdo sobre el contenido del proyecto.
