Por La Estrella de Panamá
Del 22 al 27 de enero de 2019, Panamá será el epicentro para la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), una cita de la Iglesia católica para la cual el Cómite Organizador Local (COL) invertirá de US$50 millones a US$55 millones, con lo que estima una derrama económica para el país de hasta US$$250 millones.
Se espera la llegada de más de 400.000 peregrinos de 190 países, de los cuales 100.000 devotos ya están inscritos, pero Roberto Alfaro Estripeaut, director del COL, advirtió que ‘la costumbre ha sido que en los últimos tres meses del año se registran y pagan la gran mayoría de los asistentes'.
Alfaro Estripeaut explicó a La Estrella de Panamá que el monto final dependerá de la cantidad de feligreses que se inscriban hasta el último día, el 31 de diciembre del 2018.
Con el pago de la cuota de inscripción, esperan recaudar cerca de US$35 millones. Además, estiman que en dinero efectivo y bienes donados por entes privados y empresas locales y extranjeras, sumarán otros US$10 millones.
Del apoyo logístico del Gobierno Nacional para adecuar las áreas en los eventos principales se calculan otros US$10 millones. ‘Esto hace un total de US$55 millones', detalló Alfaro.
En base a eventos realizados previamente, el COL concluye que en enero del 2019 ingresarán a la economía del país entre US$200 millones y US$250 millones en concepto de consumo de comidas, compras al comercio, comunicaciones, actividad bancaria, agencias de turismo y hotelería, consumo de productos industriales y agrícolas, transporte, aéreo, marítimo y terrestre, construcción de tarimas, impuestos de aeropuerto e impuesto de Impuesto de Transferencia de Bienes Muebles y Servicios , la exposición internacional, entre otros.
El también exembajador de Panamá en Washington considera que ‘los hoteles estarán todos llenos antes, durante y algunos días después de la jornada, ellos y los restaurantes serán los mayores ganadores'.
El gasto promedio por peregrino durante la semana del 22 al 27 de enero, se estima en unos US$200, pero muchos llegarían por su cuenta por mas días, calculan los organizadores.
El cálculo que maneja el COL es que podrían registrarse como peregrinos -pagando cuota- unos 200.000 jóvenes y además se le sumarían unos 10.000 voluntarios, nacionales y extranjeros, y otros 100.000 turistas católicos que normalmente asisten a ver al papa por su cuenta.
Según Alfaro, en los eventos finales se estima que se unirán otros 300.000 panameños de todo el país que acompañarán al papa para escuchar su mensaje de despedida y el anuncio de donde será la próxima jornada. ‘Podríamos entonces tener en un total de unos 600.000 participantes entre el sábado y el domingo', calculó.
La Iglesia está invitando a las familias a que acojan a los peregrinos, pero de no poder acomodar a todos, el gobierno tiene un plan B, prepararán algunos gimnasios y aulas de escuelas cercanas a los eventos parroquiales para poder alojar a los peregrinos.
El gobierno por su parte, no ha definido un presupuesto específico para la JMJ, pero garantizará aspectos como la sanidad, movilidad, seguridad y servicios básicos a través de un comité interinstitucional ‘que establecerá sus necesidades y costos de acuerdo a su protocolo', según la Presidencia.
Varias voces han criticado la inversión oficial en un evento religioso dentro de un Estado laico, a lo que el gobierno contestó que ‘independientemente de la selección del país por parte del Vaticano, el Gobierno debe destinar recursos para su desarrollo, pues hay voces que señalan la acción de capricho político'. Sostuvieron también que ‘Panamá compitió a nivel internacional para lograr ser sede de la JMJ 2019. Esta postulación estuvo respaldada por las Conferencias Episcopales de Centroamérica'.
La magnitud del evento pondrá a prueba los servicios básicos de la ciudad y la capacidad logística.
Del 22 al 27 de enero de 2019, Panamá será el epicentro para la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), una cita de la Iglesia católica para la cual el Cómite Organizador Local (COL) invertirá de US$50 millones a US$55 millones, con lo que estima una derrama económica para el país de hasta US$$250 millones.
Se espera la llegada de más de 400.000 peregrinos de 190 países, de los cuales 100.000 devotos ya están inscritos, pero Roberto Alfaro Estripeaut, director del COL, advirtió que ‘la costumbre ha sido que en los últimos tres meses del año se registran y pagan la gran mayoría de los asistentes'.
Alfaro Estripeaut explicó a La Estrella de Panamá que el monto final dependerá de la cantidad de feligreses que se inscriban hasta el último día, el 31 de diciembre del 2018.
Con el pago de la cuota de inscripción, esperan recaudar cerca de US$35 millones. Además, estiman que en dinero efectivo y bienes donados por entes privados y empresas locales y extranjeras, sumarán otros US$10 millones.
Del apoyo logístico del Gobierno Nacional para adecuar las áreas en los eventos principales se calculan otros US$10 millones. ‘Esto hace un total de US$55 millones', detalló Alfaro.
En base a eventos realizados previamente, el COL concluye que en enero del 2019 ingresarán a la economía del país entre US$200 millones y US$250 millones en concepto de consumo de comidas, compras al comercio, comunicaciones, actividad bancaria, agencias de turismo y hotelería, consumo de productos industriales y agrícolas, transporte, aéreo, marítimo y terrestre, construcción de tarimas, impuestos de aeropuerto e impuesto de Impuesto de Transferencia de Bienes Muebles y Servicios , la exposición internacional, entre otros.
El también exembajador de Panamá en Washington considera que ‘los hoteles estarán todos llenos antes, durante y algunos días después de la jornada, ellos y los restaurantes serán los mayores ganadores'.
El gasto promedio por peregrino durante la semana del 22 al 27 de enero, se estima en unos US$200, pero muchos llegarían por su cuenta por mas días, calculan los organizadores.
El cálculo que maneja el COL es que podrían registrarse como peregrinos -pagando cuota- unos 200.000 jóvenes y además se le sumarían unos 10.000 voluntarios, nacionales y extranjeros, y otros 100.000 turistas católicos que normalmente asisten a ver al papa por su cuenta.
Según Alfaro, en los eventos finales se estima que se unirán otros 300.000 panameños de todo el país que acompañarán al papa para escuchar su mensaje de despedida y el anuncio de donde será la próxima jornada. ‘Podríamos entonces tener en un total de unos 600.000 participantes entre el sábado y el domingo', calculó.
La Iglesia está invitando a las familias a que acojan a los peregrinos, pero de no poder acomodar a todos, el gobierno tiene un plan B, prepararán algunos gimnasios y aulas de escuelas cercanas a los eventos parroquiales para poder alojar a los peregrinos.
El gobierno por su parte, no ha definido un presupuesto específico para la JMJ, pero garantizará aspectos como la sanidad, movilidad, seguridad y servicios básicos a través de un comité interinstitucional ‘que establecerá sus necesidades y costos de acuerdo a su protocolo', según la Presidencia.
Varias voces han criticado la inversión oficial en un evento religioso dentro de un Estado laico, a lo que el gobierno contestó que ‘independientemente de la selección del país por parte del Vaticano, el Gobierno debe destinar recursos para su desarrollo, pues hay voces que señalan la acción de capricho político'. Sostuvieron también que ‘Panamá compitió a nivel internacional para lograr ser sede de la JMJ 2019. Esta postulación estuvo respaldada por las Conferencias Episcopales de Centroamérica'.
La magnitud del evento pondrá a prueba los servicios básicos de la ciudad y la capacidad logística.
