Por La Prensa (Panamá)
Las protestas se dan contra la negociación de un acuerdo entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por US$1.750 millones, lo que ocasionaría el pago de nuevos impuestos.
Transportistas entrevistados por medios locales, este sábado 3 de octubre, dijeron que tienen de tres a cuatro días sin poder continuar hacia países de Centroamérica y temen que sus productos se dañen o sean víctimas de robo o vandalismo.
Precisamente, el viernes en la noche se dieron actos de vandalismo en la provincia de Limón (Caribe) y en Pérez Zeledón (sur), según reportes policiales.
En las manifestaciones participan camioneros, pescadores y sindicatos del sector público, y fueron convocadas por el autodenominado Movimiento Rescate Nacional para presionar al gobierno del presidente Carlos Alvarado a desistir de su propuesta de impuestos temporales para sanear las finanzas públicas en busca de un entendimiento con el FMI.
Los bloqueos además de perjudicar el comercio internacional evitan el paso hacia puertos y zonas productivas, informaron las autoridades costarricenses. Datos oficiales revelan que los bloqueos causan, hasta el momento, pérdidas de 37 millones de dólares solo en el sector agrícola.
Mientras que el turismo, la mejor industria con la que cuenta el país, ya que aporta entre el 8% y el 9% del PIB y da trabajo a unas 600 mil personas de manera directa o indirecta, es otro de los más afectados.
Costa Rica, abrió las puertas a los turistas procedentes de la Unión Europea desde agosto pasado, y en septiembre hizo lo mismo con visitantes de Estados Unidos, principal fuente de turistas de ese país.
Este sábado, el gobierno aceptó una propuesta de mediación de la Iglesia Católica, pero condicionada a que se levanten los bloqueos para comenzar el diálogo.
Nicaragüenses piden continuar
Un grupo de 290 nicaragüenses que salieron de la ciudad de panamá hacia su país quedaron varados en Paso Canoas al no poder continuar su viaje.
Ellos piden que los dejen continuar, ya que luego de tres días, se están quedando sin dinero.
Las protestas se dan contra la negociación de un acuerdo entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por US$1.750 millones, lo que ocasionaría el pago de nuevos impuestos.
Transportistas entrevistados por medios locales, este sábado 3 de octubre, dijeron que tienen de tres a cuatro días sin poder continuar hacia países de Centroamérica y temen que sus productos se dañen o sean víctimas de robo o vandalismo.
Precisamente, el viernes en la noche se dieron actos de vandalismo en la provincia de Limón (Caribe) y en Pérez Zeledón (sur), según reportes policiales.
En las manifestaciones participan camioneros, pescadores y sindicatos del sector público, y fueron convocadas por el autodenominado Movimiento Rescate Nacional para presionar al gobierno del presidente Carlos Alvarado a desistir de su propuesta de impuestos temporales para sanear las finanzas públicas en busca de un entendimiento con el FMI.
Los bloqueos además de perjudicar el comercio internacional evitan el paso hacia puertos y zonas productivas, informaron las autoridades costarricenses. Datos oficiales revelan que los bloqueos causan, hasta el momento, pérdidas de 37 millones de dólares solo en el sector agrícola.
Mientras que el turismo, la mejor industria con la que cuenta el país, ya que aporta entre el 8% y el 9% del PIB y da trabajo a unas 600 mil personas de manera directa o indirecta, es otro de los más afectados.
Costa Rica, abrió las puertas a los turistas procedentes de la Unión Europea desde agosto pasado, y en septiembre hizo lo mismo con visitantes de Estados Unidos, principal fuente de turistas de ese país.
Este sábado, el gobierno aceptó una propuesta de mediación de la Iglesia Católica, pero condicionada a que se levanten los bloqueos para comenzar el diálogo.
Nicaragüenses piden continuar
Un grupo de 290 nicaragüenses que salieron de la ciudad de panamá hacia su país quedaron varados en Paso Canoas al no poder continuar su viaje.
Ellos piden que los dejen continuar, ya que luego de tres días, se están quedando sin dinero.
