La preocupación se funda en la falta de detalles sobre el destino de recursos y una asignación adicional de US$260 millones al Ministerio de Comunicaciones e Infraestructura para fines de 'administración'.
'El presupuesto aprobado es oscuro y de los menos transparentes, porque en este caso no está claro su destino y su objeto', dijo a periodistas el consultor Marvin Flores, de Acción Ciudadana, capítulo Guatemala de Transparencia Internacional.
Según Flores una parte de los fondos autorizados se destina a empresas vinculadas a diputados y al pago de gastos de campaña de partidos de gobierno y oposición.
El presupuesto aprobado 'es un bolsón de recursos que sugiere que es una medida clientelar de cara a las elecciones', consideró el economista inddependiente y exviceministro de Finanzas (Hacienda), Erick Coyoy.
'Ese monto adicional (de US$260 millones) corre riesgo de desviarse o malversarse para fines político electorales en el marco de los comicios de 2015', afirmó a su vez el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) en un comunicado.
En el presupuesto aprobado hay 'retrocesos (...) graves en los controles y medidas de transparencia del gasto público, consideró
'El Icefi lamenta que el Gobierno haya optado por una negociación que resultó en la aprobación de un presupuesto plagado de problemas y opacidad'.
Los expertos criticaron también la creación de un nuevo impuesto a la telefonía celular y la ampliación de otros dos tributos.
Estimaron que lo más prudente es que el presidente Otto Pérez vete el presupuesto aprobado, que registra un cifra récord en la historia del país.
En tanto, el viceministro de Comunicaciones, Rubén Mejía, dijo al diario Prensa Libre estar 'sorprendido' de la asignación adicional por lo que solicitará una explicación al Ministerio de Finanzas.
No obstante, consideró que los recursos podrían ser un complemento para inversión en infraestructura y el pago de un subsidio al transporte público en la capital.
A su vez, el ministro de Finanzas, Dorval Carías, evitó hacer comentarios al indicar que el presupuesto aún 'está en estudio'.
