Por estrategiaynegocios.net
El Gobierno de El Salvador anunció que ha aceptado la propuesta realizada por la banca privada local para reperfilar la deuda pública de corto plazo en el país.
El 24 de agosto la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA) presentó al Ministerio de Hacienda una propuesta cuyo objetivo es reperfilar la deuda de corto plazo y trasladándola a mediano y largo plazo con vencimientos de 2, 3, 5 y 7 años.
Mediante un comunicado, el Ministerio de Hacienda respondió que acepta la propuesta y aseguró que la medida tendrá un impacto positivo en las finanzas públicas permitiendo disminuir la deuda pública por medio de amortizaciones programadas, mejorar el perfil de vencimiento de las obligaciones y fortalecer la sostenibilidad fiscal.
"La operación se desarrollará poniendo en marcha un plan de nuevas emisiones, a través del cual se hará el pago respectivo al vencimiento de cada título en posesión de la banca participante y posteriormente la emisión de nuevos títulos a un plazo mayor, lo anterior sin incrementar la deuda del país", dijo la cartera de Estado.
Sin embargo, no se dieron detalles de cuándo comenzará este proceso de reestructuración ni las tasas de interés que se pagarán.
El Gobierno salvadoreño cuenta con un instrumento llamado Letras del Tesoro (LETES) y Certificados del Tesoro (CETES) que es deuda que emite sin autorización de la Asamblea Legislativa y compra la banca local y se paga en menos de un año. Este instrumento es una especie de "tarjeta de crédito para emergencias"; sin embargo, su saldo ha ido en constante crecimiento poniendo bajo presión las finanzas.
Según datos del portal de Transparencia Fiscal de Hacienda, la deuda del sector público no financiero de El Salvador ascendía a junio de 2023 (sin contar pensiones) a US$18.361 millones, de los cuales US$2.567 millones corresponden a LETES y CETES.
Este valor de deuda de corto plazo equivale a 7,3 % del producto interno bruto (PIB) salvadoreño.
Anteriormente los bancos privados dijeron que participarán “activamente en este programa de emisiones del país, contribuyendo de esta manera al crecimiento económico sostenible de El Salvador dentro de un marco de estabilidad financiera”.
ABANSA dijo que esta propuesta tiene como objetivo apoyar los esfuerzos del país para mejorar su perfil de deuda, disminuir el riesgo país percibido por los mercados internacionales y lograr un marco de estabilidad fiscal a mediano plazo.
Cabe recordar que el Indicador de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI por sus siglas en inglés) ha venido disminuyendo y se encuentra en 7,78 % (casi el doble del promedio de Latinoamérica), lo cual limita la posibilidad de colocar eurobonos en el extranjero y la adopción del bitcoin como moneda de curso legal ha paralizado las negociaciones de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.