Por E&N
El interventor Alex Anel Arroyo reveló que han establecido una especie de acuerdo temporal con los proveedores de la telefónica con los que se tienen deudas atrasadas. El pasado 4 de mayo, la ASEP designó a Alex Anel Arroyo como interventor. El objetivo de la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP) es asegurar la continuidad del servicio. el operador digital reforzará la disponibilidad de tarjetas de recarga de saldo a nivel nacional, facilitando que los clientes sigan conectados a la red de telefonía, informó La Prensa.
En el último mes, Arroyo se enfocó en garantizar el pago de las cuentas corrientes para que la deuda no aumente. “Se les pagará mes a mes y no se dará espacio a mayor deuda, mientras se determine qué pasará con la operación a futuro”, dijo.
Lea más: Digicel se retira de Panamá, ante la fusión de Cable & Wireless Panamá y Claro
Aún falta el informe final sobre la realidad que dejó Digicel y su viabilidad para seguir operando. Arroyo detalló que falta definir una solución final para determinar el manejo de los pagos morosos de vieja data. “El trabajo más relevante es garantizar que siga activo el servicio que brinda la empresa”, dijo Arroyo, quien reconoce que a su llegada como interventor pudo detectar síntomas de deterioro.
Desde la intervención de Arroyo, los clientes de Digicel han encontrado tarjetas de recarga en abarroterías, tiendas de celulares y puntos de atención de Digicel en todas las provincias. También se puede hacer recargas electrónicas en línea. Arroyo informó que los clientes percibían que la empresa dejaría de funcionar, por lo que no estaban haciendo sus recargas.
Este proceso es parte de la estrategia que se ha tejido para garantizar la continuidad del servicio, considerando que los clientes estaban enfrentando problemas para el suministro de recarga de los minutos y servicios en los centros de atención al cliente de la empresa, informó La Prensa. Arroyo contó que otros exclientes de Digicel han cambiado a otro proveedor para recibir los servicios de comunicaciones, lo que estaría afectando los ingresos de la compañía.
Arroyo expresó que se ha logrado restablecer la línea de suministro de recarga y se han recuperado los puntos de atención, tanto en los call centers, como en las tiendas. Al mismo tiempo, y con la idea de motivar la llegada de más ingresos, Digicel está haciendo promociones, teniendo como enganche data ilimitada a precios bajos.
A finales del mes de abril el Consejo de Gabinete aprobó tomar el control de la concesionaria a través de la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP) , “con la finalidad de garantizar la continuidad de los trabajadores y del servicio de comunicaciones personales”, según informó el Gobierno.
La empresa informó que continuará brindando sus servicios de manera regular a sus clientes hasta que culmine el proceso judicial, con el cual se oficializará su salida del mercado panameño, donde inició operaciones hace 14 años. “La aprobación de la fusión, sin considerar los remedios apropiados para los operadores restantes, elimina la libre competencia y pone en desventaja a Digicel Panamá S.A., en comparación con las reglas que existían cuando ingresó al mercado en 2008”, reiteró Digicel Panamá S.A. el pasado 6 de abril en su solicitud de liquidación ante los Tribunales de Justicia Civiles de Panamá. Es la primera empresa de telecomunicaciones que da un servicio público y que toma una decisión como esta en Panamá.
En abril de este año, Digicel Panamá dijo que tomó la decisión de cerrar operaciones como consecuencia de la aprobación de la fusión de Cable & Wireless Panamá (CWP) y Claro Panamá, “decisión que representa el fin de la libre competencia para el mercado de las telecomunicaciones en el país”. Con la compra de Claro y la salida que planeaba Digicel, de un mercado de cuatro competidores, Panamá se quedaría con dos grandes emporios dominando la plaza: CWP y Tigo.
A raíz de esta situación fue que el Gobierno panameño intervino para evitar la concentración de mercado. Como interventor, Arroyo está facultado para realizar las diligencias tendientes a investigar y emitir un informe sobre la realidad financiera y operativa de Digicel. Arroyo no reveló el monto al que ascienden las deudas de la empresa, ni el perfil de los acreedores.
