Por AFP
En el primer trimestre de 2022/23 (entre abril y junio), Nintendo registró un beneficio neto de 118.900 millones de yenes (US$893 millones), cuyo aumento de 28% respecto al año anterior se explica por la depreciación del yen, explicó el grupo en un comunicado.
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Sus ventas retrocedieron 4,7% en un año hasta situarse en 307.500 millones de yenes (US$2.300 millones) durante el mismo periodo.
Nintendo precisó que las ventas de su consola Switch cayeron 22,9%, debido sobre todo a la escasez mundial de semiconductores y otros componentes.
Su beneficio operativo se redujo 15% en el primer trimestre interanual, hasta 101.600 millones de yenes (US$772 millones).
El grupo japonés mantuvo sus previsiones, de mayo, para el conjunto de ejercicio 2022/23, considerando que “la producción y la logística podrían sufrir el impacto de factores como los obstáculos de suministro de piezas, entre ellos los semiconductores, y los riesgos relacionados con el covid-19”.
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Por ello, prevé un beneficio neto de 340.000 millones de yenes (US$2.600 millones) durante todo el ejercicio --lo que conllevaría un retroceso de casi 29% en un año--, y un beneficio operativo de 500.000 millones de yenes (US$3.800 millones), es decir una reducción de 15,7% comparado con 2021/22.
