En Honduras se han vendido 4.1 millones de quintales de café en el ciclo productivo 2013-2014, lo que representa unos US$550 millones en divisas, asegura el presidente de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras.
Por: La Prensa
Contra todos los pronósticos negativos influenciados por el ataque de la roya y la caída del precio internacional en los últimos meses del año anterior, los resultados de la cosecha de café 2013-2014 en Honduras -que inició el primero de octubre pasado- son alentadores en términos de generación de divisas.
El volumen de los envíos sí registrará un descenso, debido a que miles de productores no lograron renovar o rehabilitar sus cafetales a tiempo. Miguel Alejandro Pon, gerente general de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecafeh), habla en exclusiva con La Prensa.
¿Ya se terminó de vender todo el café de la cosecha 2013-2014?
No. Hasta la fecha hemos vendido el 80% de la producción nacional, que representan 4.1 millones de quintales del grano.
El 20% restante se va a ir colocando en el transcurso de los meses que aún quedan de la cosecha. El año cafetero inicia el primero de octubre, pero el producto comienza a salir en volúmenes considerables en diciembre, enero y febrero. En marzo ya comienza a disminuir la producción. En este momento queda poco café.
¿Cuánto se ha generado en divisas hasta el momento?
De acuerdo a la última actualización van $550 millones.
¿Cuántos quintales estima que se produjeron en total?
Proyectamos cerrar con una cosecha de 5.5 millones quintales.
¿Cuál será la generación final de esos quintales?
Las exportaciones de café generarán un máximo de $800 millones en divisas, un poco más que la producción anterior que anduvo en $795 millones.
¿Cuál es el principal destino de exportación del grano hondureño?
Europa, un 72% del café hondureño se va para ese destino, la mayoría entra por Alemania. Luego está América y Asia, siempre hay un poquito de café que se envía a áfrica y Oceanía. En países estamos hablando de Alemania, Estados Unidos y Corea, son los principales importadores del producto hondureño. El café de aquí es de muy buena calidad y muy competitivo, estamos en todos los mercados. Si nos falta explorar es en el café especial, hay mucho potencial, pero todavía hay que trabajar para entrar en esos nichos. Estos son granos que son certificados por las buenas prácticas agrícolas, otros son orgánicos, entre otros.
¿Qué significó para el sector cafetalero el alza internacional en el precio del café?
Fue una buena noticia. Vino a incentivar al productor de café, lamentablemente el incremento se dio en un momento en el que los cafetaleros ya habían vendido casi toda su cosecha. Los que se beneficiaron más son aquellos que habían almacenado grano, jugándosela al esperar si había un aumento. Esperamos que para la siguiente cosecha los niveles de los precios ronden arriba de los $150, aunque saber qué sucederá en el mercado es algo difícil, porque en este momento el alza que se dio en la bolsa internacional se debió a la sequía de Brasil, y en estos días se pronosticaron lluvias para ese país.
¿Logró cambiar el ánimo de los productores que sufrían por las pérdidas de una mala cosecha?
Un poco, porque la subida del mercado fue muy brusca. En muchos años no se había visto un aumento tan drástico y rápido, el precio rondaba los $120 por quintal y de la noche a la mañana estábamos en $195 e incluso ha llegado a sobrepasar los $200. Que va a compensar del todo las pérdidas por la reducción del cultivo que provocó la roya, no. Pero sí ayudará a que el impacto sea menor en la generación de divisas. Toda la industria espera que los precios se mantengan, porque los costos de producción en Honduras son los más elevados de Centroamérica.
¿Qué tan difícil será para los productores recuperarse, luego de dos cosechas malas?
Muy difícil. No voy a decir que no se hicieron algunas gestiones por parte de algunas instituciones como el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) y el Consejo Nacional del Café (Conacfe). Sin embargo, considero que hace falta mucho por hacer, hay productores que quedaron esperando financiamientos para renovar o recuperar las fincas que tenían dañadas, pero el dinero nunca llegó. La mayoría de los cafetaleros en el país son pequeños productores y no tiene acceso a créditos. Aunque sí se consigue dinero para el sector, los requisitos son muy estrictos y los pequeños no aplican.
Definitivamente la cantidad de cafetaleros va a disminuir para la nueva cosecha, hay mucha gente que se quedó sin nada y al no tener recursos para renovar los cafetales decidieron usar las tierras para cultivar granos básicos. El parque cafetero nacional es de más de 400 mil manzanas: de eso el 18% se perdió por efecto de la roya; un 20% sufrió daños parciales, y el resto, 62%, todavía están en producción y estas son las manzanas que soportaron el ataque del hongo y salvaron la cosecha.
¿Cuáles son las proyecciones para la cosecha 2014-2015?
Nosotros esperamos, aunque es un dato muy preliminar, que podríamos llegar a los 6 millones de quintales exportables. Hay motivación en recuperar las fincas, esta ha sido impulsada por el alza en el precio internacional. Posiblemente, para la cosecha 2015-2016, dependiendo de las gestiones que se hagan y la facilidad del productor para acceder a créditos, tendremos una cosecha que supere la del 2011-2012.
¿Qué se hace para asegurar un aumento en la producción?
Hablando del sector exportador, las empresas que forman parte de Adecafeh están desarrollando diferentes programas de apoyo como certificación de fincas y fertilización. Se trabaja directamente con los productores. Estamos haciendo un esfuerzo grande para lograr que la producción incremente cada año.
¿Qué medidas están tomando para protegerse de la roya?
La roya siempre ha existido en el país, el asunto es que el año pasado vimos un efecto mucho más fuerte que otros años, esto definitivamente tiene que ver con el cambio climático. La roya llegó a regiones donde jamás había afectado los cultivos, por la altura en la que estos estaban, así que debemos analizar más este tema.
¿Están preparándose para no verse afectados por el cambio climático?
Sí, estamos trabajando. En este momento el mayor impacto lo vimos con la roya, pero de este hongo surgen otros problemas. La roya seca toda la hoja y el grano se cae, y recordemos que todo lo que está en el suelo es un criadero para otro tipo de plagas como la broca.
Estamos claros que para poder prevenir se necesita de mucho recurso, y esa es la parte difícil.
