Federico álvarez, expresidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), destacó e el compromiso del actual Gobierno hondureño por mantener una disciplina fiscal en el gasto, y una actitud más fuerte de recaudación tributaria, factores determinantes para tener indicadores económicos saludables.
¿Tomando en cuenta los indicadores económicos actuales diría usted que existe una mejoría a nivel macroeconómico en Honduras?
Sí, hay una mejoría real con todo lo que tiene que ver con la parte macroeconómica y hay un mayor equilibrio fiscal, sin duda. El resto del país es la atracción de inversiones y la generación de empleo; pero hay que reconocer que todo aquel desorden que había en el Gobierno anterior se ha superado.
¿Qué factores han sido determinantes para lograr alcanzar indicadores saludables?
La disciplina fiscal en el gasto del Gobierno y una actitud muy agresiva en recaudación de impuestos tributarios.
¿Qué representa para Honduras el cambio de perspectiva de riesgo país de B+negativo a B+ positivo, que dio Standard & Poor’s?
Significa que hay mayor estabilidad, y por lo tanto la perspectiva de corto plazo es mejor que la que antes teníamos. Aclaro, esto no significa que el país haya mejorado mucho, pero es un paso importante para caminar hacia el desarrollo.
¿Qué tan bueno es crecer a un ritmo de 3.6%, como lo está haciendo Honduras?
El crecimiento que Honduras necesita para comenzar una ruta de desarrollo es de 6.5%. El 3.5% es mejor que el crecimiento negativo, pero todavía estamos lejos de lo que el país necesita para que exista generación de valor y de empleo.
¿Con todos los programas que se están desarrollando para incrementar la inversión nacional y extranjera es posible alcanzar un crecimiento de 6.5% a un corto plazo?
No, porque las inversiones actuales las está haciendo el Gobierno; son muy buenas porque es una solución temporal a la falta de empleo, pero el único empleo que genera riqueza es la inversión a largo plazo, por ejemplo cuando se abren fabricas, y ahí es adonde debemos apuntar.
Honduras ha intentado adherirse al Acuerdo Transpacífico que busca Estados Unidos con los países asiáticos. ¿Afectaría al país no poder ingresar?
No. Al final del día los tratados de libre comercio lo que hacen es abrir oportunidades, y oportunidades para exportar hacia Estados Unidos tenemos todos, es decir, que no hemos llegado ni al 1% de nuestra capacidad de exportación. Tenemos espacio para crecer hasta un 10% en EUA. Por otro lado, no creo que el TPP vaya a salir adelante.
¿Cree que afectó a la economía el incremento de algunos impuestos en 2013?
La política fiscal ha afectado a muchas empresas que antes no pagaban o que no están capacitadas para absorber el costo del pago de los impuestos. No obstante, yo creo que más que alza de impuestos, que sí ha habido, lo que más se ha hecho es mejorar el desempeño de recaudación. Antes había mucha evasión fiscal y ahora se está despertando una cultura de pago.
¿Tiene el país un clima agradable para atraer la inversión?
Todavía no, yo creo que se necesita trabajar mucho en seguridad jurídica, en reducir la corrupción y la violencia. Si seguimos trabajando en mejorar estos tres campos, sí podremos lograr tener un mejor clima de inversión.
¿Qué tanto han afectado los altos costos de producción a la atracción de nuevas inversiones?
Mucho. El costo de producción en Honduras es alto, y no porque sean costos inflacionarios de las adquisiciones que se hacen.
Algunos son costos relacionados con las dificultades burocráticas para obtener los trámites necesarios para operar, costos por la ineficiencia del sistemas de seguridad, de agua, de luz, entre otros. Por ejemplo, hoy en día muchos empresarios tienen en los restaurantes una planta eléctrica porque la luz se va a cada rato; también tienen que tener seguridad privada, por la inseguridad, estos son costos adicionales de país que hacen que la operación se vuelva costosa sin necesidad.
