Por: AFP
La estatal brasileña Petrobras, una de las mayores empresas del mundo, está en el ojo de la tormenta por denuncias de corrupción que de confirmarse podrían destapar uno de los mayores escándalos en la historia del país.Hace apenas un par de años, Petrobras anunciaba el mayor plan de inversiones del planeta para duplicar su producción de crudo en 2020 y convertir al país en un exportador, tras el descubrimiento de las inmensas reservas del 'presal', a unos seis kilómetros bajo el suelo marino.
Hoy, el escándalo amenaza con tener un impacto en la gigantesca compañía y en las elecciones de octubre, ya que parte habría tenido lugar bajo las narices de la presidenta y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, actualmente en 'empate técnico' con la ecologista Marina Silva en la primera y segunda vuelta, según la última encuesta.
- 1. Las denuncias
Costa acusa de participar en el esquema de corrupción a más de 50 legisladores (incluidos los presidentes de ambas cámaras del Congreso), gobernadores, al ministro de Energía, en su mayoría del Partido de los Trabajadores (en el poder desde 2003) y de dos partidos de la coalición gobernante. Todos niegan las acusaciones o no se han expresado al respecto. El presidenciable del Partido Socialista Eduardo Campos, fallecido en un accidente aéreo en agosto y reemplazado por su compañera de fórmula Marina Silva, también fue mencionado.
Las coimas existirían desde que el PT llegó al poder en 2003. Rousseff fue ministra de Energía de 2003 a 2005 y presidenta del consejo de administración de Petrobras de 2003 a 2010, aunque no ha sido directamente implicada en las denuncias.
2. ¿Mensalao 2?
Debido al peso de Petrobras y al hartazgo de los brasileños con la corrupción en el país, el escándalo 'puede ser como nitroglicerina' en la campaña electoral, aunque aún es pronto para estimar su alcance, dice a la AFP el politólogo Daniel Alves, de la Fundación Getulio Vargas (FGV).
Muchos comparan el escándalo con el 'mensalao', un mecanismo de compra de votos de legisladores de la coalición orquestado por el primer gobierno del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010). Pero pese a las denuncias Lula fue reelecto. '¿Será otra vez tan generoso el pueblo?', se pregunta Alves, aunque insiste en tener cautela porque ningún crimen ha sido confirmado.
3. Pésimos negocios
Al escándalo por las coimas se suman negocios sospechosos que son investigados actualmente por el Congreso, entre ellos la compra a la belga Astra Oil de una refinería en Pasadena (Texas, EE.UU.) por US$1.200 millones, que ésta había adquirido un año antes por solo US$42,5 millones.
La refinería Abreu y Lima en Pernambuco (noreste), que Petrobras decidió construir en 2007 con Venezuela, tenía un presupuesto inicial de US$2.300 millones. Venezuela finalmente nunca financió la obra, cuyo costo es estimado hoy en US$20.000 millones.
4. Menos lucro
'Es obvio que esto va a impactar en el nivel de lucro de la empresa; las acciones de la empresa caen en el mercado', señala la economista Margarida Gutierrez, de la Universidad Federal de Rio, para quien los inversores perderán confianza en la rentabilidad de la empresa.
'Si van a comenzar a revisar cada contrato de la empresa, eso perjudicará y mucho a la industria petrolera y gasífera' en Brasil, estimó el analista André Perfeito, de Gradual Investimentos.
La caída de las acciones ha sido limitada no obstante por una tendencia alcista con cada noticia que sugiere que Rousseff puede perder los comicios, luego de cuatro años de magro crecimiento económico y sin expectativas de mejora en los próximos dos.
Las denuncias se suman al fuerte rechazo que el mercado tiene del intervencionismo del gobierno en Petrobras, y analistas estiman que ahora aumentará la presión por una menor injerencia política en la empresa.
5. Los candidatos
Rousseff asegura que no estaba al corriente de nada. 'Si hubo alguna cosa, y todo indica que hubo, las sangrías que podrían existir han terminado', afirmó.
Su rival Marina Silva acusa al gobierno de mantener en sus cargos 'a una banda que está acabando con Petrobras'. Niega la responsabilidad de Campos en el escándalo.
El socialdemócrata Aecio Neves, tercero en las encuestas y el preferido del mercado, afirma que Petrobras 'fue asaltada' y que Rousseff 'tenía la obligación de saber lo que sucede en su entorno'.
