La criminalidad es una de las principales afecciones para el crecimiento del crédito productivo, por lo que el país debe trabajar en disminuirla y garantizar la seguridad física, apuntó Armando Arias, presidente de la Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa),
Según la patronal bancaria, la inseguridad limita a las pequeñas y medianas empresas para continuar invirtiendo y solicitando financiamiento.
Además, señalaron a la inclusión financiera como parte de los retos por considerar para mejorar las condiciones económicas salvadoreñas, ya que la exclusión financiera perjudica a los sectores más vulnerables, al incrementar sus costos
Las personas de bajos ingresos y los trabajadores por cuenta propia son quienes no logran acceder a financiamiento, métodos seguros de ahorro o a seguros de vida y riesgos; no por opción, sino por necesidad.
Los banqueros sugirieron facilitar los servicios bancarios a los salvadoreños en el exterior y sus familias, para que las remesas sirvan en la creación de un fondo de ahorro.
Los microcréditos, tarjetas y servicios de monedero local son iniciativas que han tenido éxito en otros países para fomentar la inclusión y reducir la pobreza, explicó Barraza.
Por otro lado, los representantes bancarios señalaron que aunque el sector público está de acuerdo en fomentar la inclusión, se han aprobado algunas leyes que van en contra de dicha iniciativa; como el impuesto a las operaciones financieras
