<div id='DTElementID-4989294' class='WebText'><em><strong>Por: Gabriela Origlia - estrategiaynegocios.net</strong></em>&quot;El camino del vino&quot; es una excursi&oacute;n internacionalmente reconocida que se realiza en la provincia argentina de Mendoza, cuna de algunas de las mejores bodegas de Latinoam&eacute;rica que exportan al mundo.Pero tambi&eacute;n es el t&iacute;tulo de un film dirigido por Nicol&aacute;s Carreras (http://www.elcaminodelvino.tv), quien se dio el gusto de contar una historia de ficci&oacute;n pero con personajes reales. Se trata de un sommelier que perdi&oacute; el gusto y el olfato y que llega a Mendoza para recuperarlos.El sommelier est&aacute; personificado por el uruguayo Charlie Arturaola, quien cata vinos desde hace a&ntilde;os con reconocimiento internacional. Ante la falta de respuesta m&eacute;dica a su padecimiento, decide hacer el camino con su amigo, el chef Donato De Santis (italiano, fue cocinero de Gianni Versace en Miami, est&aacute; radicado en Argentina) y seguir los consejos de Michel Rolland, quien est&aacute; considerado uno de los mejores en&oacute;logos del mundo, capaz de catar cien vinos en un d&iacute;a. El tr&iacute;o desanda recorridos por las bodegas mendocinas y, en un punto, se burlan un poco de la profesi&oacute;n del sommelier, &quot;que vive de una sofisticaci&oacute;n que debe sostener a toda costa, montada sobre im&aacute;genes que construye el especialista para los dem&aacute;s&quot;, cuenta Carreras. Rolland admite que no hay consejos que valgan ya que, el &quot;buen vino es el vino que te va a dar placer, pero a ti, no a todos Y si no me gusta a m&iacute;, no importa'. Asegura que ni siquiera hay forma de saber si un vino es bueno o malo al momento de comprarlo, antes de probarlo, aunque algunas marcas o nombres ofrezcan cierta seguridad. Sin embargo, enumera las claves para reconocer la calidad: color, aroma, balance y calidad de taninos.Arturaola destaca en los vinos mendocinos (el 70% se fabrica mirando la posibilidad del mercado exterior) algo &quot;muy bueno&quot; y es que sus taninos y sus fenoles son &quot;muy dulzones y eso gusta mucho al paladar de los nuevos consumidores&quot;.En el caso de Rolland descubri&oacute; Argentina en 1998 y su potencial vitivin&iacute;cola lo conquist&oacute;; junto a socios franceses compr&oacute; un campo en Mendoza y lo dividieron en siete parcelas elaborando su vino estrella el Clos de Los Siete. A su vez, cada propietario produce con &eacute;l sus propios vinos donde prevalece el Malbec la cepa argentina por excelencia. Dice que tanto en tierras mendocinas como en la Patagonia se podr&iacute;an conseguir muy buenos Merlot si el trabajo en los vi&ntilde;edos fuera importante. Arturaola est&aacute; convencido de que el mundo vive una &quot;vino-mutaci&oacute;n muy importante&quot; y considera que se trata de una etapa &quot;necesaria y conveniente. Hay que volver a la esencia, como dice el bodeguero argentino Jos&eacute; Zuccardi en la sinopsis de El Camino del Vino&quot;. Es que en la pel&iacute;cula, el viaje lo lleva al sommelier al vaso de vino despojado de toda pretensi&oacute;n y tambi&eacute;n a su infancia, cuando jugando a las escondidas se meti&oacute; en un barril de vino y sinti&oacute; su aroma por primera vez.Charlie Arturaola recorre el mundo haciendo catas. En una realizada en la regi&oacute;n espa&ntilde;ola Castilla-La Mancha recomend&oacute; en la categor&iacute;a &quot;vinos con buena relaci&oacute;n calidad-precio…que cautivar&aacute;n&quot; el Yemanueva, de Bodega La Tercia; Mureda Syrah 2010, de Bodegas Mureda; Dominio de Gardel 2010, de Bodegas Gardel; Mirador de Castilla 2008, de Vinos & Bodegas y Los Galanes de Bodegas Santa Catalina. &quot;Son vibrantes, modernos, destacan por su gran valor y por ejemplarizar a la perfecci&oacute;n su buen hacer&quot;, es el resultado.En 2012, el sommelier-educador, fue jurado del concurso Park Hyatt Mendoza Wine Challenge, en el que se seleccionaron los nuevos vinos que pasaron a integrar la carta de Bistr&oacute; M, el restaurante principal del hotel, despu&eacute;s de una cata a ciega de 600 vinos.Para tenerlos en cuenta, los elegidos fueron: Gala III de Bodega Luigi Bosca (mejor blanco); Navarro Correas Selecci&oacute;n del En&oacute;logo Blend II de Bodega Navarro Correas (mejor tinto); Trumpeter Extra Brut de Bodega Rutini Wines (mejor espumante) y Zuccardi Zeta de Bodega Familia Zuccardi, coronado como el mejor vino del concurso.<em><strong>Con la firma de Rolland</strong></em>Si le interesa probar algunos de los vinos que salen de la bodega que Michel Rolland tiene en Argentina, Clos de los 7, los expertos eligen: <em><strong>Clos de los 7 2006</strong></em>, es blend del Valle de Uco (50% Malbec, 30% Merlot, 10% Syrah y 10% Cabernet Sauvignon). Es rico en frutas negras y rojas, de taninos balanceados. La combinaci&oacute;n varietal que ofrece el corte logra seducir a los consumidores que prefieren los vinos con mucha presencia de fruta.<em><strong>Val de Flores 2002</strong></em> es considerado por los expertos el primer vino argentino 100% Michel Rolland, un aut&eacute;ntico Malbec world class que ya va por su d&eacute;cima cosecha. Con notas de evoluci&oacute;n de frutas maduras, combinadas con el roble. Su paso por boca revela que ha sido un vino estructurado.<em><strong>Clos de los Siete 2009</strong></em> es un Sauvignon Blanc con un complejo blend tinto , de cinco variedades. Tiene frutas rojas y negras, pero tambi&eacute;n pinceladas mentoladas, pimienta blanca y un toque de pirazina muy leve. <em><strong>Lo que no puede faltar</strong></em>Un amante del buen vino e incluso aquellos que reci&eacute;n se inician en la pasi&oacute;n deben armarse de un kit b&aacute;sico en su cava para poder disfrutar al m&aacute;ximo de las catas. Los entendidos recomiendan los instrumentos que no pueden faltar.Por su puesto, a la cabeza est&aacute;n las copas (las marcas Riedel o Spiegelau est&aacute;n entre las mejores). Lo ideal es contar con media docena de copones para tinto, igual cantidad para los tinto y otras seis &quot;flautas&quot; para los espumantes. Los Impitoyables son los copones para la cata profesional. La moda del vino trajo tambi&eacute;n la de los sacacorchos, de los que hay decenas de variantes. Los sommeliers eligen los de doble impulso.Las bombas extractoras de aire es otro instrumental &quot;obligado&quot;; la de Vacuum-Vin de acero inoxidable figura entre las m&aacute;s elegidas. Para evitar manchas odiosas, hay que tener el cortagotas, que ya se fabrican hasta personalizados. Si es m&aacute;s cl&aacute;sico, puede quedarse con un atajagotas (anillo de metal fino con un interior de felpa para que absorbe la gota cuando cae por el cuello de la botella). Los term&oacute;metros garantizan el placer de tomar el vino a la temperatura justa.Aunque est&aacute; en discusi&oacute;n, el decanter se incluye en el conjunto. Hay una diversidad muy amplia, incluyendo grandes marcas como Riedel Flamingo o Swan. Los que quieren el equipo completo deben sumar el bolso porta botellas que permite el traslado, sin riesgo, de los vinos. La marca Built in NY es lo &uacute;ltimo en la materia.<br /><br /></div>