POR AFP
El gigante de la alimentación y los productos de limpieza Unilever enfrenta críticas de Ucrania y una protesta contra su sede en Londres este lunes por continuar con sus operaciones en Rusia, pese al conflicto.
La Agencia Nacional de Ucrania para la Prevención de la Corrupción puso a la empresa en su lista de “patrocinadores internacionales de la guerra”, según un comunicado de este lunes.
Unilever enfrenta críticas “por su continua presencia en la Federación de Rusia y los cuantiosos impuestos que alimentan el presupuesto del Estado ruso” y apoyan “la guerra de Rusia contra Ucrania”, señaló el organismo en un comunicado.
Un grupo de manifestantes ucranianos y británicos protestaron este lunes ante la sede en Londres de esta multinacional.
Desde el inicio de la invasión rusa contra Ucrania Unilever suspendió “todas las importaciones y exportaciones desde y hacia Rusia” y todos los gastos de publicidad en el país, donde afirma que ya no invierte.
La multinacional fue interrogada por AFP y le envió como respuesta un comunicado que data de febrero y que explica que “para empresas como Unilever que tienen una presencia importante en el país, salir no es tan simple”.
La empresa emplea a más de 3.000 personas en Rusia y sigue comerciando productos fabricados en el país.
La compañía afirma que “entiende” los llamados a cesar sus actividades, pero no quiere abandonar a sus empleados en Rusia y afirma que si lo hiciera sus operaciones quedarían en manos del Estado ruso.
Según sus resultados anuales para 2022, un 2% de sus resultados netos fueron generados en Rusia, en un ejercicio en el que su beneficio neto registró un alza del 26% y se ubicó en 7.600 millones de euros (8.200 millones de dólares).
