Doraszelski a&ntilde;ade que su investigaci&oacute;n tambi&eacute;n puede cambiar la forma en que las personas perciben la productividad. &quot;Desde el punto de vista hist&oacute;rico, las personas consideraban la productividad como un n&uacute;mero &uacute;nico. Lo que estamos mostrando es que no es as&iacute;. El cambio tecnol&oacute;gico tiene numerosas dimensiones&quot;, dice ella. &quot;Cambia la perspectiva que las personas tienen de la productividad. Eso significa que tenemos que repensar c&oacute;mo la medimos y tomar en cuenta el hecho de que es multidimensional&quot;.<strong>Diferentes dimensiones de la productividad</strong>Doraszelski y Jaumandreu consiguieron descifrar las diferentes dimensiones de las ganancias de productividad porque usaron datos acumulados por la empresa y combinaron esos datos con t&eacute;cnicas econom&eacute;tricas avanzadas. &quot;Es el primer estudio a nivel de empresa sobre los cambios provocados por la distorsi&oacute;n tecnol&oacute;gica&quot;, dice Doraszelski. Investigaciones anteriores siempre estimaron el cambio tecnol&oacute;gico utilizando datos altamente agregados, tales como todo el sector de manufactura de EEUU.&quot;Como mucho, eso podr&iacute;a darnos una medici&oacute;n media del cambio tecnol&oacute;gico&quot;, dice. Por contra, &quot;nuestra estrategia es la inversa&quot;, observ&oacute; Doraszelski. &quot;Comenzamos con los datos de la empresa y a continuaci&oacute;n estimamos el cambio tecnol&oacute;gico en el contexto de la empresa individual […] Podemos llegar hasta el nivel de la industria, pero podemos tambi&eacute;n ver lo que hay detr&aacute;s de la media&quot;.Los autores usaron datos de 2.375 empresas manufactureras, en un periodo comprendido entre 1990 y 2006, en un universo de diez industrias de Espa&ntilde;a. Los datos fueros obtenidos de la &quot;Investigaci&oacute;n sobre estrategias empresariales&quot;, una encuesta realizada por el ministerio de Industria de Espa&ntilde;a.El periodo cubierto por los datos es el r&aacute;pido crecimiento de la producci&oacute;n acompa&ntilde;ado por el estancamiento del empleo o por un aumento discreto del mismo junto con inversiones &quot;intensas&quot; en capital f&iacute;sico, seg&uacute;n la investigaci&oacute;n. Los investigadores escogieron Espa&ntilde;a porque se trata de una econom&iacute;a industrializada que comenz&oacute; su integraci&oacute;n total en la Uni&oacute;n Europea a partir de finales de los a&ntilde;os 80 hasta principios de los 90. &quot;Cualquier tendencia de cambio tecnol&oacute;gico revelado por nuestro an&aacute;lisis en Espa&ntilde;a&quot;, seg&uacute;n la investigaci&oacute;n, &quot;puede ser entendida, por tanto, como ampliamente representativa de otras econom&iacute;as continentales de Europa&quot;.Doraszelski y Jaumendreu calculan que el cambio tecnol&oacute;gico que eleva el grado de mano de obra tiene como resultado aumentos de la producci&oacute;n de cerca de un 2%, de media, al a&ntilde;o. Por ejemplo, la utilizaci&oacute;n de equipos avanzados en la planta de producci&oacute;n puede hacer que los trabajadores fabriquen, de media, un 2% m&aacute;s de productos. Ese aumento de la productividad de la mano de obra no se debe, sobre todo, al paso de un trabajador sin especializaci&oacute;n a un trabajador especializado. &quot;Por el contrario, en muchas industrias la productividad de la mano de obra crece porque los trabajadores con un determinado conjunto de habilidades se vuelven m&aacute;s productivos con el paso del tiempo&quot;, se&ntilde;alan los autores.Por tanto, ¿eso prueba la visi&oacute;n de los macroeconomistas de que el cambio tecnol&oacute;gico aumenta de por s&iacute; la productividad de la mano de obra? No del todo. La producci&oacute;n tambi&eacute;n crece porque todos los factores de la producci&oacute;n se vuelven m&aacute;s productivos, y no porque la mano de obra se vuelva m&aacute;s productiva. De hecho, el an&aacute;lisis de los datos muestra que debido al cambio tecnol&oacute;gico neutral en el sentido de Hicks, la producci&oacute;n crece, de promedio, un 2% m&aacute;s al a&ntilde;o.