La alianza de los dos partidos tradicionales de Honduras designó como presidente legislativo al diputado Mauricio Oliva, del gobernante Partido Nacional, en medio de gritos y abucheos por parte de los diputados del Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), que dirige el derrocado expresidente Manuel Zelaya.
Por: AFP
El oficialista Partido Nacional de Honduras (PN, derecha) logró este martes en una accidentada sesión y con el apoyo del Partido Liberal (PL), el control del nuevo Congreso que asumirá funciones a partir del sábado, constataron periodistas de la AFP.
La alianza de los dos partidos tradicionales de Honduras designó como presidente legislativo al diputado Mauricio Oliva, del gobernante Partido Nacional, en medio de gritos y abucheos por parte de los diputados del Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), que dirige el derrocado expresidente Manuel Zelaya.
El zafarrancho se produjo ante la negativa del ministro del Interior, Africo Madrid quien dirigía la sesión de acuerdo con la ley a realizar una votación por computadora para que quedara constando el voto de cada diputado.
Madrid argumentó que el sistema de cómputo interno aún no tenía registrados los nombres de los nuevos diputados por lo cual la decisión se tomó a mano alzada.
Los diputados de Libre empezaron a gritar para impedir la votación pero Madrid siguió con el proceso de nombramiento de los nuevos directivos, que juramentó de inmediato.
'Quieren establecer un partido único y eso no es democracia', advirtió Zelaya, quejándose del comportamiento de los diputados del PL que aportaron sus votos para que el oficialismo presidiera el Congreso.
En las elecciones presidenciales y legislativas del 24 de noviembre pasado, el PN obtuvo sólo 48 de las 128 curules, seguido de Libre con 37, el PL con 27, el Partido Anticorrupción (PAC, centro derecha) 13, más otros tres de igual número de partidos pequeños.
El Congreso saliente, que culminó sus sesiones la noche del lunes, presidido por Oliva, se dedicó desde diciembre a aprobar en una desenfrenada carrera un centenar de leyes para allanar el camino al nuevo gobierno.
Entre estas leyes, una de las más controvertidas, aprobada en diciembre, es un paquete tributario que subió del 12 al 15% el impuesto sobre ventas y redujo de 300 a 70 los productos de la canasta básica exenta de impuestos.
