Costa Rica va a las urnas este domingo para escoger al presidente y los integrantes de la Asamblea Legislativa (congreso) que gobernarán al pequeño país centroamericano durante los próximos cuatro años.
Las siguientes son cinco claves para entender a Costa Rica, un país de 4,9 millones de habitantes.
País verde de energías limpias
Costa Rica se posiciona en el mundo como un paraíso natural que atrae cerca de 3 millones de turistas por año para visitar sus playas y montañas y apreciar su naturaleza.
Con 0,03% de la superficie terrestre en 51.000 km2, el país posee cerca de 6% de la biodiversidad del mundo, según cifras oficiales.
El país vedó la caza deportiva y desde 2011 mantiene una moratoria sobre la explotación petrolera, que estará vigente hasta 2021, año en que pretende ser carbono neutral.
Su sistema de Parques Nacionales y Reservas tiene bajo protección 25,6% del territorio, incluyendo fuentes termales, cavernas, cañones de ríos, volcanes y bosques.
También ha mantenido una generación eléctrica basada casi por entero en energías limpias. Durante los últimos tres años, cerca de 98% de su generación eléctrica provino de fuentes renovables, principalmente hídrica, aunque también cuenta con fuentes geotérmicas, eólicas, biomasa y solar, según el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).
Democracia estable y sin ejército
Costa Rica
es una de las democracias más estables de América Latina, que vivió su última interrupción al orden institucional en el período 1917-1919, con la deposición del entonces presidente Alfredo González Flores a manos de su ministro de Guerra, Federico Tinoco.
En 1948 vivió una guerra civil de 44 días, provocada por denuncias de fraude en las elecciones de ese año, que condujo a la instauración de una junta de gobierno que abolió el ejército en 1949 y sentó las bases para la modernización del país.
Su estabilidad democrática, con elecciones presidenciales cada cuatro años, se mantuvo intacta durante el decenio de 1980, cuando otros países centroamericanos vivían guerras civiles.
Crecimiento económico, déficit fiscal
Costa Rica ha mantenido una economía estable los últimos años, con
niveles de crecimiento cercanos a 4% los últimos años. Según el Banco Mundial, el PIB costarricense creció 3,9% en 2017 y proyecta una expansión de 3,7% en 2018. Sin embargo, arrastra un elevado nivel de desempleo, que alcanzó 9,3% al final de 2017.
El mayor problema económico del país es el déficit fiscal, que en 2017 llegó a 6,2% del PIB, el más alto de los registros del Banco Central.
Como consecuencia del abultado déficit, el saldo de la deuda pública alcanzó 65,1% del PIB en 2017, lo que 'introduce vulnerabilidades para la estabilidad macroeconómica', según el Banco Central.
El gobierno del presidente Luis Guillermo Solís no ha logrado que el congreso apruebe una reforma tributaria para hacerle frente al déficit fiscal, como tampoco pudieron los tres gobiernos anteriores, que también lo intentaron.
Homicidios en niveles históricos
Costa Rica registró
en 2017 el nivel más alto de homicidios en su historia, con 603 muertes violentas, atribuidas principalmente a ajustes de cuentas entre bandas delictivas y el narcotráfico, según la policía judicial.
La cifra equivale a 12,1 homicidios por cada 100.000 habitantes, la tasa más alta registrada por el país centroamericano. La Organización Mundial de la Salud considera 'epidemia' cuando hay más de 10 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Según el Organismo de Investigación Judicial, 48% de las muertes violentas del último año fueron por ajustes de cuentas y venganzas entre grupos delictivos y 25% estuvieron vinculados al narcotráfico.
Mayoría conservadora
El actual proceso electoral puso de relieve la tendencia conservadora de la sociedad costarricense, cuando un debate sobre matrimonio homosexual proyectó la candidatura del diputado evangélico Fabricio Alvarado, por su oposición a las uniones entre personas del mismo sexo.
Estudios de opinión realizados los últimos dos años por el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica indican que el país está dividido sobre temas como matrimonio homosexual, uso recreativo de la marihuana, estado laico y aborto en caso de violación.
Alrededor de 65% de los consultados en los estudios tiene posturas conservadoras opuestas a esos temas, frente a 35% que tiende a posicionarse a favor.
'Estamos hablando de un país conservador, religioso', comentó el politólogo Felipe Alpízar, director del CIEP.
Indicó que, según los estudios, 80% de la población costarricense dice que la religión es importante en su vida, y 70% se identifica como católico.
