'Ya estamos llegando a límite donde distribuidoras ya toparon sus líneas de crédito para hacer efectivo el pago. El Gobierno no les ha pagado desde junio'. La frase es de Javier Simán, presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), en una conferencia de prensa el miércoles para denunciar el impago del Estado salvadoreño al sector eléctrico.
En el último capítulo de impago del Gobierno de El Salvador, la ASI y la Cámara Americana de Comercio (AmCham) urgieron al Gobierno a pagar su deuda con el sector eléctrico. Del 30 junio al 31 de diciembre de 2016, el Estado salvadoreño le debía a la industria eléctrica US$45.8 millones. El monto es mayor ya que el dato a enero de este año suma US$53 millones.
La deuda corresponde al retraso en el pago correspondiente al subsidio a la energía eléctrica. Las distribuidoras eléctricas son las encargadas de manejar el subsidio el cual beneficia a los usuarios que consumen menos de 99 kwh. Sin embargo, desde junio de 2016 el Gobierno salvadoreño no ha desembolsado el pago de este subsidio.
¿El resultado? Una cadena de impagos de las distribuidoras eléctricas con los generadores, los importadores de energía, los comercializadores. La cadena de impagos ha llegado a Guatemala, desde donde se importa el 23% de la electricidad que se consume en El Salvador. "Los proveedores de energía de Guatemala, como no se les ha pagado, ya no quieren dar más crédito a nuestro país, y a los que les compran petróleo para generar a través de búnker tampoco le quieren dar crédito a las empresas generadoras, por ende se puede llegar a un momento en que haya racionamiento (de energía)", criticó Carmen Aída Muñoz, directora ejecutiva de AmCham.
Semanas atrás, el Gobierno anunció que busca aprobación en el Congreso de emisión de bonos por US$550 millones. Dentro de estos, se incluirían US$46 millones para pagar esta deuda. Pero, la Asamblea Legislativa no lo ha aprobado. El Ejecutivo dispuso que este año la estatal Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) se encargaría de hacer los pagos del subsidio, pero en el presupuesto de la autónoma solo consignaron US$100 para mantener el subsidio.
A lo largo de 2016, el Gobierno salvadoreño ha demorado en pagar: la devolución del IVA a los exportadores, el subsidio de la energía eléctrica y las transferencias del gobierno central a la municipalidades. La situación es tal que Fitch Ratings rebajó la calificación de riesgo soberano a 'B' desde la 'B+', con perspectiva negativa y lo redujo a un peldaño de bono basura. Además, FUSADES ha criticado en repetidas ocasiones las carencias del Presupuesto General de la Nación.
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'Desde que vimos las manifestaciones del no pago, del subsidio a distribuidoras, la AmCham ha mandado 15 cartas (...) a todos los funcionarios de Gobierno haciendo ver problemática de las empresas. Las empresas han sido pacientes y tolerantes. (Pero) la liquidez les afecta porque están deteniendo sus propias inversiones, esperando el reintegro que deben hacer. Las líneas de crédito se están terminando', resaltó Muñoz.
El último escenario de esta crisis de impago generaría racionamientos de energía. Simán resaltó que el problema no se origina por falta de oferta eléctrica. 'Paralizar con racionamiento sería desastros para el país, se paralizan hospitales, cabe notar que no es un problema de que no haya proveedores. Tenemos energía para abastecer el país, es un factor externo que es ese subsidio que el Gobierno no está pagando. Si el Gobierno quiere seguir dando el subsidio debe dar los recursos para que el sector no se vea afectado y no deje de operar', dijo el presidente de la gremial. En El Salvador, la industria consume el 40% de la energía que se consume en el país.
Inestabilidad jurídica y alza de tarifas
'Necesitamos enviar un buen mensaje a inversionistas ya que si nuestra mira es atraer inversionistas para atraer empleo para los salvadoreños tenemos que poner estas cosas en orden', sentenció Claudia de Ibañez, presidenta de la AmCham. Además, advirtió que la cadena de impagos podría devenir en un posible alza de tarifas eléctricas. 'Si no logramos poner esto en orden y se cancele lo que se les adeuda (a las distribuidoras), se pueden elevar tarifas eléctricas. Eso va a afectar a la industria, a las empresas, a las personas'.¿Hasta cuándo pueden aguantar las empresas del sector eléctrico y evitar racionamientos? Una fuente cercana del sector dijo que hasta marzo. 'Ya llegamos al punto donde generadores e importadores no tienen cómo cubrir desabastecimiento. Ya las distribudoras no tienen líneas de crédito para seguir pagando puntualmente. Ya llegamos a ese punto. Se puede venir un problema más grave si no se resuelve esta situación ya', finalizó Simán e invitó a buscar alternativas.
