Aunque vivir en las grandes ciudades tiene muchos atractivos, como por ejemplo la oferta cultural, de entretenimiento y de bienes y servicios; las largas jornadas, los problemas de transporte y los costos cada vez mayores de desplazamiento hacen que muchos sueñen con llegar en 10 o 15 minutos a su lugar de trabajo y evitar así empezar el día en medio de trancones y retrasos.
Este sueño, que pareciera poder cumplirse solo en las grandes capitales europeas como París, Barcelona o Londres, también es una realidad en ciudades como Bogotá gracias a la tendencia de construcción de las llamadas "oficinas de nicho", que usualmente están ubicadas en edificaciones de uso mixto y que son desarrolladas especialmente para las personas que buscan trabajar cerca de su lugar de residencia.
Un ejemplo de gran capital latinoamericana: teniendo en cuenta que según un estudio contratado por el Departamento de Planeación Nacional, los bogotanos gastan diariamente alrededor de 2 horas en desplazamientos, lo que equivale aproximadamente a 7 millones de horas al año en el transporte público, no es sorpresa que esta tendencia se haya convertido no solo en una opción cada vez más atractiva para los bogotanos sino en la respuesta a los problemas de movilidad.
De hecho, según una encuesta realizada por el portal trabajando.com, el 59% de los trabajadores siente que el traslado a la oficina no les permite trabajar adecuadamente a causa del estrés, y el 73% considera que la distancia entre el hogar y el lugar de trabajo es uno de los factores más importantes a la hora de aceptar una oferta laboral.
Sin embargo, el ahorro de tiempo no es la única ventaja que tiene vivir cerca del trabajo. Conozca a continuación otros beneficios que esta medida puede proporcionar:
- Un menor tiempo de desplazamiento equivale a más tiempo para descansar, practicar deporte, aprender un nuevo pasatiempo y disfrutar de la compañía de su familia.
- Llegar sin afanes ni sufrir de las incomodidades del transporte público ayudan a empezar el día sin estrés y con mejor disposición, lo cual aumenta la productividad. Además, entre más bajos sean los niveles de estrés, menor es la probabilidad de sufrir de enfermedades y ausentarse del trabajo.
- Trabajar cerca de casa disminuye el uso del automóvil, lo que significa un ahorro sustancial del dinero que normalmente gasta en gasolina o en transporte público.
- Tener la posibilidad de almorzar en casa ayuda a ahorrar dinero y comer de una forma más saludable.
- Caminar diariamente al trabajo o llegar en bicicleta reducen el sedentarismo y mejoran la calidad de vida.
- Vivir en un lugar central permite pagar recibos, hacer compras y aprovechar de la oferta de entretenimiento de la ciudad con mayor facilidad y sin necesidad de largos desplazamientos.
- Cuando no es necesario realizar grandes recorridos para llegar a la casa o el trabajo las personas pueden desplazarse más seguido a pie, lo que disminuye considerablemente el tráfico en zonas de alto flujo de personas.
