En el país, se debe 'fortalecer la convivencia pacífica y la cultura de paz para garantizar la seguridad ciudadana en todo el territorio, protegiendo a la población, especialmente a las niñas y niños de la violencia en sus distintas manifestaciones', consigna una de las recomendaciones del estudio 'Voces de El Salvador.
En el estudio, unas 500 personas entre 14 y 80 años, reflexionaron sobre la situación del país con motivo del aniversario del fin de la guerra fratricida.
El Salvador cerró 2016 con 5.278 homicidios, un promedio de 14,4 muertes por día, con lo cual sigue figurando como una de las naciones sin guerra más violentas del mundo.
El coordinador residente de la ONU en El Salvador, Christian Salazar, estimó que en virtud de los altos índices de violencia que sufre la población 'hay una tendencia a subestimar los grandes logros históricos y las profundas reformas impulsadas por los acuerdos de paz' firmados el 16 de enero de 1992 por el gobierno y la entonces guerrilla del FMLN.
Este estudio también recomendó 'superar la polarización política' mediante un diálogo nacional y 'profundizar los esfuerzos para acabar con la pobreza'.
La ONU pide fomentar el acceso a la justicia de la población para 'reducir la impunidad' y 'ampliar la lucha contra la corrupción'.
También pide identificar 'la forma apropiada' para ayudar a los familiares de víctimas de la guerra para que se apliquen los principios de 'verdad, justicia y reparación'.
