Un Código de ética será incorporado en 500 empresas socias de la Cámara de Comercio Guatemalteco Americana (AmCham). El objetivo es fomentar en las compañías valores que frenen prácticas que se están volviendo comunes como los sobornos para agilizar los trámites para los negocios.
Para un permiso sanitario, por ejemplo, se debe hacer fila desde las dos de la mañana sin la certeza que lo obtendrá, pero pagando Q150 (unos US$20) a un trabajador del Centro de Salud evitará el trámite.
El gerente de una empresa de alimentos, que prefiere el anonimato, indica que los inspectores de salud para renovar una licencia vencida de forma "instantánea" piden "donaciones" que van desde efectivo hasta equipo para la entidad como computadoras.
El Banco Mundial registra que para abrir un negocio en el país son necesarios seis procedimientos y 18,5 días. La cifra es menor al promedio de Larinoamérica de 8,3 procesos y 30,1 días.
"El alto grado de corrupción en el país ya no se puede ocultar", afirma Carolina Castellanos, directora ejecutiva de AmCham. "La mayor carga recae en el sector Gobierno pero no exime a algunas empresas que se han olvidado de la ética y los valores a la hora de hacer negocios, principalmente con el Estado", afirma.
El presidente del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, Hermann Girón, subraya hay que "revisar las Ley de Compras y Contrataciones para que los concursos sean más transparentes".
SAT poco ágil
Un mes tiene varado el proyecto de un pequeño empresario para tramitar un cambio de placas en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), trámite que no debería tardar más de diez días, pero ha sido engorroso y ha debido regresar tres veces por el mismo proceso. "Lo que buscan es desgastar al contribuyente para que ofrezca un soborno", asegura el taxista.
El problema es que muchas de las prácticas ilegales como los "favores y las mordidas" se van generalizando y está bien visto, aunque no lo es, señala Ingrid Godínez, coordinadora del Código de ética de AmCham. En su opinión, para que haya corrupción debe haber dos partes y una de ellas tiene que ver con las empresas.
Desde las cámaras empresariales son claros al afirmar que se debe caer con todo el peso de la ley contra cualquier persona, institución o empresa pública o privada que esté al margen de la ley.
Javier Zepeda, director ejecutivo de la Cámara de Industria, reconoce que cada día más se da una pérdida de principios, valores y ética. Añadió que el problema es que no existe la certeza de castigo a quien viola la ley.
De la misma forma condenó los actos corruptos, Jorge Briz, presidente de la Cámara de Comercio quien opinó que "se le hace daño a la imagen del país".
