La ralentización de la demanda de las importaciones en la primera mitad del año ha sido una de las razones centrales para que los economistas de la entidad efectúen esta revisión a la baja.
La OMC ajustó igualmente sus proyecciones para 2015, año en el que considera que el crecimiento del comercio llegará como máximo al 4%, en lugar del 5,3% calculado previamente.
Estas tasas son claramente inferiores a la media de crecimiento de los últimos veinte años, que ha sido del 5,2%. Sin embargo, la OMC no descarta que el crecimiento del comercio pueda ser incluso menor al final del año, entre otras razones, por el crecimiento desigual de la economía global.
Otros riesgos claros que identifica para el resto de 2014 y para 2015 tienen que ver con la crisis entre Ucrania y Rusia, la ofensiva del grupo yihadista Estado Islámico en Irak y Siria, la intervención militar de Estados Unidos y sus aliados y la crisis sanitaria desatada por la epidemia del ébola en áfrica Occidental.