En el nombramiento de los tres miembros del Tribunal Superior de Cuentas (TSC), el martes por el Congreso, 'no se tomó en cuenta las recomendaciones formuladas por esta misión (...) relativas a la garantía de autonomía e independencia' del organismo, dijo en comunicado la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH).
La MACCIH, nombrada en febrero a petición del presidente Juan Orlando Hernández, advirtió que las recomendaciones se plantearon conforme a la Convención Interamericana Contra la Corrupción que permiten 'contar con órganos contralores independientes y eficaces'.
El presidente de la no gubernamental Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), Carlos Hernández, denunció que el nombramiento se hizo mediante 'una negociación de tres partidos políticos', en una señal a la comunidad internacional de que Honduras no quiere combatir la corrupción.
Hernández, que acompañó los nombramientos en el Congreso, dijo que se retiró al enterarse de 'una negociación que habían realizado tres partidos políticos' para designar los magistrados de los próximos siete años para que respondan a sus intereses.
El dirigente de la sociedad civil lamentó que se perdió la oportunidad de enviar un mensaje contundente de compromiso con la lucha contra la corrupción.
Recordó que la elección de los magistrados del TSC se realizó a pocos días de que se hiciera pública la exclusión de Honduras del listado de países que pueden postular a recibir fondos de la Cuenta Desafío del Milenio para 2017.
Honduras accedió solo una vez a US$215 millones de la Cuenta del Milenio y no ha vuelto a clasificar por deficiencias en la lucha contra la corrupción.
