Al cierre de septiembre de 2021 los depósitos del centro bancario internacional aumentaron un 2,9% frente a similar periodo de 2020, para totalizar US$96.710.9 millones. Desde el año pasado, incluso en pandemia, los depósitos en la plaza están creciendo y marcan en septiembre niveles históricamente altos.
Según su origen, los depósitos se clasifican como internos y externos. Los primeros representan la mayoría de los depósitos del sistema, con US$62.293.3 millones, US$1.213,7 millones o 2% más que en septiembre de 2020.
Dentro de ese grupo, el grueso lo representan los depósitos de particulares, que totalizan US$47.526,6 millones, con un crecimiento de US$3.130,7 millones o 7.1% en un solo año.
La Superintendencia de Bancos de Panamá explicó que el mayor aumento de los depósitos se da en personas jurídicas, con un aumento de $2,422 millones comparado con septiembre de 2020, mientras que en personas naturales también crecen, pero en menor medida (US$915 millones de aumento).
Javier Motta, director de Estudios Financieros de la Superintendencia de Bancos de Panamá, dijo que la evolución de los depósitos locales se puede relacionar con el crecimiento orgánico en lo que va de año; un incremento de operaciones corporativas en los que los depósitos se ponen como garantía de financiamientos; y la existencia de depósitos nuevos, lo que se muestra por el incremento en la cantidad de cuentas, particularmente en los ahorros corrientes de personas, algo que, a su juicio, es reflejo de signos de recuperación económica.
Por su parte, el financista Daniel Oblitas señaló que el comportamiento de los depósitos particulares internos refleja también que aún no se ha reactivado la capacidad de consumo, y hay prudencia en el gasto.
Depósitos oficiales
El año pasado hubo un fuerte repunte de los depósitos oficiales, que este año muestran una caída, para totalizar US$11.391,3 millones.Motta explicó que los depósitos oficiales tuvieron un comportamiento atípico durante el 2020, producto de los fondos obtenidos en los mercados internacionales para hacer frente a las afectaciones de la pandemia y obligaciones adquiridas.
En el transcurso del año 2021, se han ido cancelando obligaciones producto de compromisos adquiridos y ya al mes de septiembre se observa que se está volviendo a los niveles históricos, comentó.
El otro gran grupo de depósitos son los externos, que también han mantenido un comportamiento ascendente en el último año, para totalizar US$34.417,6 millones (US$1.514,1 millones o 4,6% de crecimiento).
En este sentido, Motta señaló que el crecimiento se explica por la incorporación al centro bancario internacional de un banco de capital peruano que estaba radicado en el Caribe y por el incremento de depósitos de particulares de personas naturales en busca de estabilidad cambiaria y expectativa de reactivación económica.
Oblitas apuntó al respecto que el incremento de depósitos internacionales puede deberse a que muchos ahorristas latinoamericanos ven al centro financiero como un refugio para sus depósitos, dada la inestabilidad política y económica de sus países.
Desde el punto de vista del negocio bancario, el incremento de los depósitos mejora la liquidez, pero presiona el margen financiero de los bancos porque sube el costo financiero y por eso las tasas tienden a bajar, explicó el financista.
