Remesas familiares en Centroamérica sumarán más de US$15.818 millones

La empresa basa sus estimaciones en cifras de los bancos centrales de la región y proyecciones de su propio negocio. Estas estimaciones están en línea con la opinión de los analistas, que observan que el mayor dinamismo en el mercado laboral de Estados Unidos y salarios más altos están contribuyendo a aumentar los flujos migratorios hacia ese país.

‘El empleo está fortalecido en Estados Unidos y eso genera una mayor renta de los inmigrantes para enviar a sus familias', señala desde Nueva York Alberto Ramos, jefe para América Latina del banco Goldman Sachs. ‘Si a eso se suma el factor cambiario, con la apreciación significativa del dólar, el aumento es aún mucho más significativo en moneda local', agrega.

En el caso de México, el principal país receptor de remesas de América Latina, este año registrará el mayor flujo desde 2009 al acumular ingresos por US$25.083 millones, según AirPak, que también opera en ese país.

La cifra supone un incremento de 6% interanual, aunque aún se encuentra US$1.000 millones por debajo del máximo nivel alcanzado en 2007, previo a la crisis. En 2014, según datos oficiales del Banco de México, los recursos enviados por los inmigrantes mexicanos sumaron US$23.647 millones.

En Centroamérica, sobresale Guatemala y Honduras.

Las proyecciones indican que las remesas transferidas por los guatemaltecos en el exterior totalizarán este año US$6.093 millones, lo que equivale a un 9.9% más que en 2014, cuando contabilizaron US$5.544 millones. En Honduras el salto es aún mayor, de 11%, ya que este año se recibirán US$3.812 millones contra los US$3.437 millones del 2014.

‘Las remesas han crecido muchísimo este año por la recuperación de la economía y del empleo en los Estados Unidos. A pesar de que la migración hacia los Estados Unidos ha bajado, aún hay mucha gente que sigue emigrando hacia allá', afirma Mario Lozano, director general de AirPak, que opera con Western Union.

Más moderado será el desempeño de Nicaragua. Los recursos enviados por los nicaragüenses que trabajan en el exterior sumarán US$1.191 millones este año frente a los US$1.136 millones que anotaron en 2014, lo que equivale a un aumento de casi 5%. En el caso de El Salvador el monto se mantendrá invariable y sólo Costa Rica registrará una caída de las remesas, al pasar de US$558 millones en 2014 a US$507,8 millones este año, según AirPak.

A diferencia de México, donde los envíos de los inmigrantes son una de las principales fuentes de ingresos de divisas pero representan apenas el 2% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, en las economías centroamericanas el impacto es mucho más significativo. Las remesas representan el 17,3% del PIB en Honduras, el 16,7% en El Salvador, el 12,5% en Guatemala y el 9,6% en el caso de Nicaragua.

Para el año próximo, el desempeño de las remesas podría mantenerse e incluso superar este récord.

‘Estimamos que para el 2016 el envío de remesas a Centroamérica y México crecerá 4%', pronostica Lozano.