Por estrategiaynegocios.net
Los esfuerzos concertados para que los trabajadores regresen a las oficinas físicas se topan con la desgana de muchos empleados y crean una nueva conversación sobre el diseño y el propósito de los espacios de trabajo propiedad de la empresa.
Meta Platforms Inc., Walt Disney Co. y Amazon.com Inc. se encuentran entre las empresas más grandes que recientemente han tratado de presionar a los trabajadores para que regresen a la oficina. Sus empleados han respondido, argumentando que pueden continuar trabajando de manera tan productiva o más productiva de forma remota.
Los trabajadores están descubriendo que los sacrificios que hicieron antes de la pandemia de COVID-19, como los largos desplazamientos al trabajo, la falta de flexibilidad y el tiempo prolongado fuera del hogar y la familia, no valen la pena a cambio de la percepción de mayor eficiencia que supone estar en un espacio físico de oficina con colegas, señala un reporte de S&P Market Intelligence.
"No elegimos ir a trabajar a la oficina, era simplemente una obligación de facto como parte de trabajar para nuestra empresa", afirmó Phil Kirschner, experto senior y socio asociado de McKinsey & Co. "Ahora, cuando los empleados están siendo Cuando les dicen 'Debes volver', rápidamente responden con '¿Por qué?' o '¿Para qué?'"
La transformación en curso del trabajo, junto con un mercado laboral históricamente activo y el avance de la inteligencia artificial, ha obligado a las empresas a comenzar a rediseñar las oficinas, permitiendo un trabajo más remoto y analizando detenidamente cómo debería ser en última instancia un espacio de oficina.
El nuevo normal
Cuando sus trabajadores totalmente remotos comenzaron a regresar a la oficina el año pasado, Uber Technologies Inc. abrió una nueva sede en San Francisco con grandes terrazas al aire libre, un centro de bienestar, ventanas operables y luz natural. La nueva sede de la oficina de Marriott International Inc., inaugurada en 2022, cuenta con múltiples espacios comunes y características de diseño destinadas a evocar más un hogar que una oficina, como varios sofás y una chimenea.
Kirschner, que asesora a equipos ejecutivos sobre estrategias laborales pospandémicas y optimización de bienes raíces, dice que la oficina del futuro continúa evolucionando, pero muchos conceptos que dominaron la vida laboral estadounidense durante décadas están muriendo rápidamente. El cubículo, por ejemplo, está a punto de desaparecer, ya que las empresas ahora consideran que una combinación diversa de espacios con oficinas privadas, estaciones de trabajo y cabinas semiprivadas es más adecuada para la productividad y la eficiencia de los trabajadores.
Una encuesta reciente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos entre arquitectos comerciales, constructores y propietarios y administradores de propiedades encontró que los mayores cambios en el diseño de edificios de oficinas esperados eran espacios de trabajo más flexibles, mejor ventilación y distanciamiento social, y permitir un trabajo más remoto e híbrido.
"Habrá muchos ajustes en el sector en el futuro previsible a medida que nos adaptemos a una nueva normalidad", dijo Curtis Dubay, economista jefe de la Cámara. "La oficina en el futuro no se verá como antes".
Habrá más espacios de colaboración pero menos espacio en general, menos oficinas en las esquinas y más oficinas construidas en áreas centrales urbanas alrededor de las comodidades que los trabajadores desean, dijo Dubay. Las empresas que no actualicen sus oficinas probablemente enfrentarán desafíos de reclutamiento y retención.
"Las empresas quieren que los trabajadores regresen porque es difícil monitorear lo que hacen cuando trabajan de forma remota, y es muy difícil construir una cultura de oficina cohesiva con objetivos alineados cuando la gente está remota", dijo Dubay.
Preguntas de productividad
La mayoría de las empresas exitosas ven la necesidad de ofrecer flexibilidad a los empleados, pero también valoran el tiempo que pasan en la oficina, donde la colaboración funciona mejor y se mejora la productividad.
Un documento de trabajo reciente de economistas del Banco de la Reserva Federal de Nueva York que estudió a los trabajadores del centro de llamadas de un minorista Fortune 500 encontró que los trabajadores remotos respondieron un 12 % menos de llamadas por hora que los trabajadores presenciales. Las razones de la diferencia aún no están claras.
"Es posible que cualquier trabajador sea menos productivo en casa", escribieron Natalia Emanuel y Emma Harrington, las autoras del artículo, en una publicación del 20 de junio. "Sin embargo, también es posible que los trabajadores menos productivos elijan trabajos remotos".
El impacto general del trabajo remoto en la productividad sigue siendo discutible, según un análisis de Goldman Sachs de estudios sobre el trabajo desde casa, que encontró que podría reducir la productividad de los trabajadores en un 18 % o, de hecho, aumentarla en un 13 %.
Inversiones de oficina
Si bien los impactos en la productividad siguen siendo confusos, la mejor manera de realizar el trabajo colaborativo es en persona, dijo Peter Cappelli, profesor de gestión en la Escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania.
"Si te preocupas por el rendimiento y la productividad, vas a impulsar eso", dijo Cappelli.
Muy pocas empresas están haciendo que la inversión en oficinas sea más propicia para la productividad, dijo, y aún menos están explicando claramente a los empleados por qué es importante que regresen a la oficina, aunque sea por unos pocos días a la semana.
"Si quieres que la gente regrese, no es como traerlos de vacaciones", dijo Cappelli. "Hay que empezar con la propuesta de por qué se quiere traer de vuelta a la gente, se necesitan pruebas. Lo que veo principalmente es que las amenazas están aumentando".
