Por Univisión
El gobierno de California presentó una demanda en contra de la cadena de ropa juvenil Forever 21 por considerar que viola la ley estatal de derechos civiles al adoptar en una de sus tiendas la política de 'English Only' que ordena a los empleados a sólo hablar ese idioma.
Los documentos legales presentados el miércoles en la Corte Superior del Condado de San Francisco argumentan que la empresa violó múltiples normas de la ley estatal que prohíbe discriminación contra empleados por el idioma que hablan.
La demanda, interpuesta por el Departamento de Empleo y Vivienda Justa (DFEH), indicá que Forever 21 prohibió a los empleados de una de sus tiendas en San Francisco hablar otro idioma diferente del inglés durante las horas de trabajo, al interactuar con algún cliente o incluso cuando los trabajadores se encontraran dialogando entre ellos en su tiempo de comida o descanso.
La política de sólo hablar inglés que estableció la administración de la tienda Forever 21, destaca el DFEH en la demanda, iba enfocada específicamente a empleados que hablaban español.
La empresa, que tiene sus oficinas centrales en Los ángeles, emitió una breve declaración en la que rechaza ese tipo de política en sus tiendas.
"Forever 21 está comprometida con la diversidad e inclusión en todas nuestras tiendas y no tiene ninguna política relacionada con el idioma que se habla en nuestras tiendas", refiere la declaración.
La demanda surgió cuando tres empleados de la tienda se quejaron de esa orden y en respuesta dijeron haber recibido represalias, como reducción de horas de trabajo y ambiente hostil por parte de la gerencia.
A través de La Raza Centro Legal, los empleados pusieron una queja de discriminación ante el DFEH para luego ir a la corte.
"Reglas que limitan o prohíben el uso de cualquier lenguaje en el lugar de trabajo, incluyendo la política de ‘English Only’, son opuestas a la ley de derechos civiles, a menos que se justifique por una necesidad comercial", declaró el director de DFEH, Kevin Kish.
La demanda busca compensación monetaria por daños para los empleados que se quejaron y que la compañía establezca medidas para prevenir la discriminación por idioma.
El gobierno de California presentó una demanda en contra de la cadena de ropa juvenil Forever 21 por considerar que viola la ley estatal de derechos civiles al adoptar en una de sus tiendas la política de 'English Only' que ordena a los empleados a sólo hablar ese idioma.
Los documentos legales presentados el miércoles en la Corte Superior del Condado de San Francisco argumentan que la empresa violó múltiples normas de la ley estatal que prohíbe discriminación contra empleados por el idioma que hablan.
La demanda, interpuesta por el Departamento de Empleo y Vivienda Justa (DFEH), indicá que Forever 21 prohibió a los empleados de una de sus tiendas en San Francisco hablar otro idioma diferente del inglés durante las horas de trabajo, al interactuar con algún cliente o incluso cuando los trabajadores se encontraran dialogando entre ellos en su tiempo de comida o descanso.
La política de sólo hablar inglés que estableció la administración de la tienda Forever 21, destaca el DFEH en la demanda, iba enfocada específicamente a empleados que hablaban español.
La empresa, que tiene sus oficinas centrales en Los ángeles, emitió una breve declaración en la que rechaza ese tipo de política en sus tiendas.
"Forever 21 está comprometida con la diversidad e inclusión en todas nuestras tiendas y no tiene ninguna política relacionada con el idioma que se habla en nuestras tiendas", refiere la declaración.
La demanda surgió cuando tres empleados de la tienda se quejaron de esa orden y en respuesta dijeron haber recibido represalias, como reducción de horas de trabajo y ambiente hostil por parte de la gerencia.
A través de La Raza Centro Legal, los empleados pusieron una queja de discriminación ante el DFEH para luego ir a la corte.
"Reglas que limitan o prohíben el uso de cualquier lenguaje en el lugar de trabajo, incluyendo la política de ‘English Only’, son opuestas a la ley de derechos civiles, a menos que se justifique por una necesidad comercial", declaró el director de DFEH, Kevin Kish.
La demanda busca compensación monetaria por daños para los empleados que se quejaron y que la compañía establezca medidas para prevenir la discriminación por idioma.
