En un entorno de cuarentenas forzosas, la digitalización de la banca pasa de ser una innovación a convertirse en la clave que mantiene a flote los servicios financieros. Ese será uno de los mayores legados de la era post covid-19.
La hidroeléctrica renace, junto con CMI, mantienen el compromiso de generar energía para garantizar el suministro de electricidad, y refuerzan acciones de apoyo al país.
A nivel regional, entre las campañas de RSE orientadas a la solidaridad y empatía con los más vulnerables, destacan en Costa Rica la de Testing Proactivo, que se lanzó en alianza con Amcham y Fundación CRUSA.
Ante una crisis sin precedentes, corresponden respuestas extraordinarias, poderosas. Las organizaciones de RSE y las empresas de Centroamérica se han despojado de esquemas del pasado, para enfrentar una titánica batalla, con nuevos poderes, con mejores herramientas, con una visión más certera de las prioridades y en unidad de acción.
El confinamiento impuesto por el covid-19 encontró a las empresas en una anomia organizacional, impera un caos horizontal y una total dependencia vertical a la jefatura. ¿Un antídoto? La holocracia.
El experto Ramez Naam cree que la nueva era del desarrollo estará marcada por la capacidad de las compañías de usar la tecnología en sumo de lo de negocio.