Durante el primer trimestre del año, la economía costarricense podría registrar una inflación interanual alrededor del 1,5% y una tasa básica pasiva de hasta 5,2%.
Estas son las estimaciones del Instituto en Investigaciones en Ciencias Económicas de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Según Rudolf Lücke, investigador del Instituto, el comportamiento del precio de los combustibles y las materias primas será determinante en el comportamiento de los precios, así como la magnitud de las variaciones en el tipo de cambio.
"De darse una depreciación del colón, el precio de los bienes importados aumentaría, encareciendo las materias primas y los alimentos", explicó.
Para el primer trimestre también se espera un incremento en los precios con motivo de aumentos en los costos de los alquileres, la educación y los servicios.
También tendrá un peso importante la presión que ejerza el Ministerio de Hacienda sobre los recursos domésticos, ya que el déficit fiscal continúa siendo uno de los principales retos del Ejecutivo.
Lücke indicó que en los últimos meses Hacienda ha captado recursos a tasas más altas, al pasar de 6,24% a finales de 2015 a cifras superiores a 7% a finales del 2016.
Estas tasas podrían subir más después de la rebaja en la calificación de riesgo anunciada el 19 de enero por la firma Fitch.
El investigador resaltó que el Banco Central incluyó en su Programa Macroeconómico un financiamiento externo por US$953 millones sin explicar la fuente de esos recursos.
En materia de intereses, el investigador opinó que es probable esperar un crecimiento en las tasas de interés en Estados Unidos que influenciarán el comportamiento de las tasas locales en moneda extranjera.
