Al comparar la cifra de los primeros cuatro meses del 2015 -US$755,5 millones- con el mismo período del 2016 -US$563,2 millones-, el pago por la factura petrolera descendió US$192,3 millones, o el 25,4%.
El ahorro del país aumenta si se comparan las cifras del 2014 y el 2016, lo que daría unos US$604 millones.
Siempre al 30 de abril, el pago por la compra de diésel alcanzó los US$222,7 millones. Por la gasolina regular se desembolsaron US$127,5 millones.
Por el gas licuado de petróleo (GLP) se cancelaron US$73,5 millones.
A esa fecha, el consumo de los productos derivados del petróleo aumentó 6,48%, unos 685.920 barriles americanos más.
El producto que más se consume en el país es el diésel, seguido la gasolina superior, la gasolina regular y el gas.
Fausto Velásquez, gerente de Ventas de Uno Guatemala, licenciataria de Shell, aseguró que la reducción del valor se le puede atribuir directamente a la variación del precio internacional del petróleo, porque Guatemala es un país netamente importador.
"Se podría decir que el país ha consumido más por los precios, lo que ha permitido que el contrabando haya bajado. En los últimos tres años, el crecimiento del consumo de diésel, gasolina superior y regular se ha mantenido en un promedio del 9%", informó Velásquez.
