Nouriel Roubini es uno de los economistas más reconocidos a nivel mundial por vaticinar la última crisis económica. Este profesor de la Universidad de Nueva York asegura ahora que la fuerza y la diversificación de la oferta de petróleo podría hacer que Oriente Medio caiga en el olvido, condenando a la región a las guerras civiles y a la pobreza, lo que a la postre podría desestabilizar el mundo de tres formas diferentes.
Roubini, en un extenso artículo publicado en Project Syndicate, asegura que si Occidente no quiere sufrir en el futuro hay que hacer algo para que la población que se encuentra en la franja que va desde el Magreb hasta Afganistán y Pakistán obtengan un nivel de vida digno. Ahora que la producción de crudo se ha diversificado, Occidente podría cometer el error de olvidar a Oriente Medio.
'Ahora que EEUU está cerca de lograr la independencia energética, existe el riesgo de que América y sus aliados del Este (Europa, Australia, etc.) consideren a Oriente Medio como una zona sin importancia estratégica. Esa creencia puede hacer mucho daño a Oriente Medio y terminar desestabilizando el mundo entero', explica el economista.
Tres desenlaces posibles
'Primero, un conflicto en la zona puede aún crear una ruptura de la oferta de petróleo como han hecho en otras ocasiones. Segundo, las guerras civiles en esa zonas puede convertir a millones de personas en refugiados que desestabilizarán Europa económica y socialmente. Este fenómeno también afectaría a los países fronterizos como Turquía o el Líbano que tendrían que absorber millones de refugiados'.
Por último, 'la prolongada miseria y desesperanza para millones de jóvenes árabes creará una nueva generación de desesperados yihadistas, que culparán a Occidente de su desesperación. Sin ninguna duda, esta opción convertiría a Europa y EEUU en el objetivo de ataques terroristas'.
Roubini sentencia que 'si Occidente ignora a Oriente Medio o intenta solucionar los problemas de la región sólamente a través de la fuerza, más que confiando en la diplomacia y los recursos financieros que estimulen el crecimiento y la creación de empleo, la inestabilidad de la región será mucho peor. Esa errónea elección perseguiría a EEUU y Europa en las próximas décadas'.
