Ya lo han advertido las altas jerarquías a nivel mundial: estamos en plena cuarta revolución industrial y el mundo debe transformarse. En el reciente foro de Davos advirtieron que este cambio va a implicar la pérdida de cinco millones de empleos a nivel mundial.
El haberse convertido en una economía de servicios puede ayudar a Costa Rica a esta transición, para que no deje un exceso de cadáveres (empleos) por el camino,
Según datos del Banco Central de Costa Rica la industria de los servicios pasó de representar un 10% de la producción del país en 1966, a un 28% en 1991 y a un 40% en el 2012 , convirtiéndose en la actividad más importante; mientras que la agricultura y la manufactura perdieron participación.
Los servicios incluyen 70 actividades, entre las que se encuentran la educación, telecomunicaciones, o centros de servicios (call centers).
El auge del sector servicios obliga a un cambio en el perfil del trabajador, quien debe tener más estudios, lo que obliga a cambios en la educación, para lo que será necesaria una mayor inversión.
La estimación se da justo en pleno cambio de metodología en la medición del Producto Interno Bruto. Hasta ahora, se estimaba la estructura productiva del país en un año y con base en esta se estimaba el PIB de ese año y los siguientes.
A partir de ahora, los años de los cuales provienen los datos son los llamados "años base", con los cuales se ha medido el PIB. Para calcularlo, se considera la cantidad de bienes y servicios producidos multiplicados por su precio.
