El gobierno de Carlos Alvarado cortó el lunes los apoyos al plan de reforma fiscal, una iniciativa que ha sido proteagonista desde el inicio de su gobierno.
De acuerdo con Nación.com, el gobierno estaba consciente de que carecía de los votos necesarios para revertir el debilitamiento de la reforma y había desistido de seguir impulsándola.
El Ejecutivo decidió desconvocar el proyecto para evitar que este continuara su camino hacia el plenario con menos fuerza, ya que los montos de recaudación se habían bajado a ¢100.000 millones en la recaudación anual esperada.
El anuncio fue hecho por la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, cerca de las 4:00 de la tarde, pero gracias a maniobras políticas, dos horas después el Ejecutivo anunció que retomaría el diálogo para evitar el naufragio de uno de los temas más urgentes de la administración que dirige Carlos Alvarado.
En resumen, el Ejectivo se vio en la encrucijada al reducirse la expectativa de recaudación adicional de ¢463.000 millones a ¢365.000 millones, lo que considera insuficiente para revertir el acelerado camino hacia la crisis fiscal y presentarse a solicitar financiamiento en organismos internacionales.
El proyecto se encuentra en el último periodo de votación de mociones de fondo en la comisión de reforma fiscal, foro donde la semana pasada diputados de Restauración Nacional (PRN), Frente Amplio (FA) e Integración Nacional (PIN), junto a un voto del PLN, exoneraron a la canasta básica del IVA, restándole ¢62.000 millones a los ingresos pretendidos.
"Los cambios a la reforma pueden ser cantos de sirena, agradables al oído pero que esconden serias consecuencias al país. Costa Rica se juega su futuro. El futuro del país está en manos de ustedes. Señoras y señores diputados, es importante considerar que no es una reforma para dispensar beneficios. Su objetivo es evitar un mal mayor, al cual nos acercamos de manera peligrosa y acelerada', había dicho inicialmente la ministra de Hacienda, Rocio Aguilar.
El gobierno anunció, a las 6:30 p. m. de la tarde del lunes, que logró abrir una nueva negociación con las fracciones legislativas en busca de recuperar los ingresos perdidos en el proyecto de reforma fiscal, por lo que mantendrá convocado el expediente. En consecuencia, los diputados tendrán que continuar este martes con la votación de mociones.
"Tengo que ser honesta, de no revertir las reformas al proyecto, debemos tomar acciones para enfrentar los ajustes automáticos que harán los mercados. Las decisiones han debilitado el proyecto. Quiero que seamos francos con los costarricenses, reducir el tamaño de la reforma es un espejismo de corto plazo", había dicho previamente la ministra de Hacienda que había remarcado: "No quiero ponerlo en términos de quién resulta ganador o perdedor. Gana el país".
Aguilar fue enfática es que es necesario echar mano de las mociones existentes para integrarle al proyecto lo que necesita.
Asimismo, dijo que desnudar al plan fiscal de impuestos como el de la canasta básica empeoraría la evasión.
"Tenemos que volver a hablar de canasta básica y de educación. Tenemos que buscar el mayor equilibrio posible. Amortiguar el déficit y cambiar la trayectoria de la deuda. Transformar el vetusto impuesto de ventas al IVA que nos permite enfrentar de manera seria la evasión. Si no tenemos canasta básica, estamos abandonando la lucha contra la evasión', comentó la ministra.
En una primera reacción tras conocerse la decisión del Ejecutivo, la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (UCCAEP), dijo que La discusión del plan fiscal es necesaria para el país, sobre todo que exista una efectiva contención del gasto, dado que pocos efectos tendríamos al elevar las tasas impositivas.
'Ante la decisión tomada por el Poder Ejecutivo de desconvocar el proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, el sector empresarial representado por la Unión de Cámaras, considera que, si bien es importante abrir espacios para dialogar y llegar a acuerdos, tal y como se está haciendo en este momento, también es relevante y urgente empezar a tomar decisiones -sean positivas o negativas- para saber hacia donde se dirigirá el país', destacó la entidad en un breve comunicado.
La UCCAEP sentenció que de serguir aumentando los egresos el país sufrirá las consecuencias, por lo que esperan una discusión de altura en el seno de la Asamblea Legislativa.
'El país merece saber transparentemente cuál es la posición en la Asamblea Legislativa, si están dispuestos a votar a favor o en contra el plan fiscal, eso si, que se conozca bien cuál será el destino del país ante tales decisiones', finalizó.
