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Tigo: Brazos dispuestos a cambiar vidas

Sus cuatro ejes de acción –educación, salud, emprendimiento y comunidad– son puestos en marcha a través de la Fundación Tigo.

2014-12-18

Por: estrategiaynegocios.net

Desde hace 18 años, con su llegada al mercado hondureño, la compañía Tigo ha desarrollado una intensa labor en los campos social y ambiental en las comunidades donde tiene operaciones. Sus programas van desde donaciones de útiles escolares, uniformes, medicamentos y equipo médico hasta proyectos de reforestación. Todos ellos bajo el lema de "Ayudar a crear sonrisas".

Con el pasar de los años, su política de RSE ha ido madurando y consolidándose, al punto de que este año 2014 creó la Fundación Tigo, por medio de la cual se sustenta en cuatro pilares para trabajar como empresa socialmente responsable. Estos ejes son: educación, salud, emprendimiento y comunidad.

El objetivo de la fundación y de sus propuestas en RSE es ayudar a cambiar vidas entre grupos vulnerables, en un país donde alrededor del 66% de la población viven en condiciones de pobreza y extrema pobreza.

En el primer pilar, educación, se cuenta con el proyecto "Tigo te conecta", pensado para expandir a escala nacional el programa de accesos gratis a Internet en escuelas públicas. La iniciativa dio inicio en el 2012 y ahora cuenta con el apoyo de las autoridades de gobierno a través de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel). En el esfuerzo de que el mayor número de menores tengan acceso a la información, se creó una red de niños y jóvenes de escasos recursos. A la fecha se ha instalado Internet en forma gratuita a unas 190 escuelas a escala nacional, beneficiando al menos a 92.000 estudiantes.

El segundo programa en ejecución se denomina "Emprendedores Tigo", por medio del cual se impulsa el emprendedurismo, la formulación de ideas que se puedan convertir en negocios familias y, a partir de ellos, que las familias tengan fuentes de ingresos.

En este terreno se les ha dado apoyo a jóvenes y madres solteras para que logren estabilidad económica. Para llevar a cabo estos planes Tigo diseñó dos modelos: el concurso de innovación "La Fábrica Smart" y "Soy Emprendedor Tigo".

El concurso surge de la necesidad de brindar apoyo al desarrollo de los grandes talentos con los que cuenta el país, en especial jóvenes universitarios que sueñan con emprender su propio negocio en el mundo de la tecnología, desarrolladores de aplicaciones web, programadores e inventores.

La primera edición se realizó hace unos meses y participaron estudiantes universitarios, quienes presentaron ideas de aplicaciones móviles (app) de carácter social. Un equipo conformado por tres jóvenes estudiantes de la UNITEC obtuvo el premio de US$6.000 de fondo estudiantil y tres computadoras. Además, con el patrocinio de Fundación Tigo podrán desarrollar su app, que será un punto de encuentro entre voluntarios y fundaciones para la promoción de sus actividades y recaudación de fondos.

El otro proyecto, "Soy emprendedor Tigo", está enfocado en mujeres solteras de zonas urbanas en riesgo social y mujeres que viven en las áreas rurales del país. A ellas se les brinda capital inicial en recargas o venta de Tigo Money y se las capacita para que se conviertan en administra-doras eficientes y puedan generar ingresos estables para sus familias. A la fecha se han beneficiado 20 familias.

Salud por telefonía móvil

El tercer área donde actúa la RSE de Tigo es en salud. Sin perder de vista que es una empresa de telecomunicaciones, aprovechó esta realidad para idear un plan gratuito de atención médica primaria, utilizando como canal el teléfono celular. Igualmente se le da prioridad a mujeres del interior del país, quienes tienen acceso gratis e ilimitado al producto "Tigo te Cuida", con solo marcar *811.

Allí pueden hacer su consulta a un médico general, quien de inmediato puede resolver casos leves e indicarles cuáles medicamentos deben tomar ellas o sus familias.

Finalmente, está el pilar de comunidad, visualizado como un plan de ayudas a programas o instituciones sociales respondiendo ante crisis originadas por desastres naturales en el país, programas de reforestación o reciclaje.

Tigo se ha involucrado con este tipo de actividades desde hace más 18 años. Actualmente la compañía inició la construcción de una piscina terapéutica para donarla a la Teletón en Tegucigalpa, valorada en unos US$70.000.

Además, ha promovido desde su presencia en suelo hondureño el voluntariado, como uno de los componentes esenciales del trabajo de la organización con las comunidades. En Honduras cuenta con más de 1.400 colaboradores, muchos de los cuales forman parte del programa de voluntarios Tigo. Con ellos se han desarrollado campañas de reforestación y de reciclaje.

También fungen como capacitadores del programa de educación en el uso de las Tecnologías de la Información (TICS). Algunos de estos programas y pilares funcionan como eje de inversión social en otros países donde la compañía tiene operaciones.

Específicamente en Honduras siempre se le ha reconocido su labor social, y este 2014 recibió, por tercer año consecutivo, el reconocimiento de ‘Empresa Ejemplar de Latinoamérica’, premio que otorga el Centro Mexicano para la Filantropía y la Alianza para la Responsabilidad Social Empresarial (ALIARSE). Hay que destacar que se trata de la única empresa de telefonía móvil de Centroamérica y Suramérica en recibirlo; años antes se le había destacado por empresa ejemplar y por mejores prácticas.

Parte de las iniciativas que han sido reconocidas es su apoyo a la fundación, Techo para mi País y la Teletón. Para la primera, en Honduras, voluntarios de la compañía trabajaron a favor de la reconstrucción de 230 casas; para Teletón, en el 2013, su aporte permitió construir una sala multisensorial conocida por sus beneficios en terapias para niños.

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