Por La Estrella de Panamá
En lo que va del año, la plataforma de reservas Airbnb, dedicada a la oferta de alojamientos a particulares, ha gestionado cerca de 79.000 hospedajes en el mercado panameño.
Sin embargo, la Autoridad de Turismo de Panamá, en un intento por paliar el descenso en la actividad de los hoteles de la capital, prohíbe la estadía de menos de 45 días en apartamentos y casas privadas, basándose en la Ley 80 de 2012.
La ATP cataloga la actividad como ‘hospedaje clandestino' desde hace tres años, penalizando a los infractores descubiertos con multas de entre US$5.000 y US$50.000.
El argumento de los sectores hoteleros, secundado por la ATP, es que los hoteles formalmente establecidos pagan impuestos, y que esta forma de reservar hospedaje es competencia desleal.
Según Airbnb, siguen manteniendo conversaciones con las autoridades porque ‘quieren legalizarse y pagar impuestos'. La Asociación Panameña de Hoteles (Apatel) indicó que la última reunión se dio con la antigua Junta Directiva del gremio, según la ATP.
El director de Políticas Públicas de América Centra y El Caribe de Airbnb comentó ayer en el conversatorio ‘Los negocios digitales en la economía Panameña', organizado por Cámara Americana de Comercio e Industrias de Panamá (AmCham), que llevan tres años esperando concretar un acuerdo de regulación con el Gobierno para el pago de impuestos, para, ‘al igual que los hoteles', compartir datos y promover a Panamá como destino.
Carlos Muñoz, directivo de la plataforma, comentó que conectan a personas de 191 países con sus alojamientos, donde estos visitantes buscan ‘otro tipo de experiencias'. El ejecutivo comentó que más personas están abocadas a la plataforma, por lo que sugirió a la población capacitarse en idiomas, con lo que se garantizaría un turismo de calidad para los visitantes.
No obstante, durante el 2017, la ATP, tras una serie de operativos en contra del hospedaje clandestino, generó un total de 60 expedientes y 24 resoluciones de multas, de las cuales se hicieron efectivas hasta alcanzar el monto de US$100.000.
En lo que va del año, la plataforma de reservas Airbnb, dedicada a la oferta de alojamientos a particulares, ha gestionado cerca de 79.000 hospedajes en el mercado panameño.
Sin embargo, la Autoridad de Turismo de Panamá, en un intento por paliar el descenso en la actividad de los hoteles de la capital, prohíbe la estadía de menos de 45 días en apartamentos y casas privadas, basándose en la Ley 80 de 2012.
La ATP cataloga la actividad como ‘hospedaje clandestino' desde hace tres años, penalizando a los infractores descubiertos con multas de entre US$5.000 y US$50.000.
El argumento de los sectores hoteleros, secundado por la ATP, es que los hoteles formalmente establecidos pagan impuestos, y que esta forma de reservar hospedaje es competencia desleal.
Según Airbnb, siguen manteniendo conversaciones con las autoridades porque ‘quieren legalizarse y pagar impuestos'. La Asociación Panameña de Hoteles (Apatel) indicó que la última reunión se dio con la antigua Junta Directiva del gremio, según la ATP.
El director de Políticas Públicas de América Centra y El Caribe de Airbnb comentó ayer en el conversatorio ‘Los negocios digitales en la economía Panameña', organizado por Cámara Americana de Comercio e Industrias de Panamá (AmCham), que llevan tres años esperando concretar un acuerdo de regulación con el Gobierno para el pago de impuestos, para, ‘al igual que los hoteles', compartir datos y promover a Panamá como destino.
Carlos Muñoz, directivo de la plataforma, comentó que conectan a personas de 191 países con sus alojamientos, donde estos visitantes buscan ‘otro tipo de experiencias'. El ejecutivo comentó que más personas están abocadas a la plataforma, por lo que sugirió a la población capacitarse en idiomas, con lo que se garantizaría un turismo de calidad para los visitantes.
No obstante, durante el 2017, la ATP, tras una serie de operativos en contra del hospedaje clandestino, generó un total de 60 expedientes y 24 resoluciones de multas, de las cuales se hicieron efectivas hasta alcanzar el monto de US$100.000.
