La empresa privada de Honduras se une para ayudar a los afectados que dejó la Depresión Tropical Eta en su paso por el país, la semana pasada.
El valle de Sula, el más productivo y capital industrial de Honduras, estaba convertido en una enorme laguna al desbordarse los ríos Ulúa y Chamelecón. Las calles estaban cubiertas de agua y las casas parecían islas, desde donde algunas personas, que treparon al techo, pedían ser rescatadas.
FOTOGALERíA: Los daños dejados por Eta en la región
La hondureña Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) dijo que las lluvias asociadas a Eta dejaron 338.563 personas afectadas, 2.764 evacuadas y 2.675 albergadas.
El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) ha estado publicando las ayudas que han hecho llegar sus agremiados a las diversas poblaciones afectadas.
Incluso, ha designado como coordinador general del sector privado en la zona norte a Mateo Yibrín, quien es asistido en Tegucigalpa por Gabriel Molina y han establecido centros de acopios.
También, en sus redes sociales indican las maneras en las que se puede ayudar a los hondureños.
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Lacthosa, la Fundación COHONDUCAFé, Cervecería Hondureña, Grupo CADELGA, además de la Fundación de la Agroindustria Azucarera, entre otros, son los que se han solidarizado con los afectados por Eta en el país hondureño.
"Hoy más que nunca empresa privada y la familia hondureña unidas para reconstruir Valle de Sula. Adelante Honduras", indicó en uno de sus tuits Aline Flores, vicepresidenta ejecutiva de la Corporación Flores.
Las ayudas van desde la entrega de canastas básicas, agua y kits de bioseguridad, ropa, algún tiempo de comida, gasolina para las lanchas que contribuyen en las labores de rescate, albergue en hoteles para aquellos que no tienen donde estar, alimentos para los mismos y la facilitación de lanchas y tractores para las labores de rescate.
Incluso, las empresas de telecomunicaciones y electricidad indican que están trabajando para restablecer los servicios en las comunidades afectadas como Yoro, Valle de Sula, Cortés, Choloma, La Lima y otras.
Bajo la etiqueta #FuerzaHonduras se pueden conocer más historias altruistas y mensajes de apoyo desde fuera de las fronteras.
Solidaridad desde fuera de las fronteras
La corporación CMI, desde Guatemala, envió ayuda a los hondureños, según lo comunicó Juan José Gutiérrez, presidente Chairman del grupo.La acción es en honor a la memoria de su padre y tío, indicó.
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"El 3/10/1974, padre y mi Tío, perdieron la vida llevando ayuda a los afectados por el huracán Fifi en Honduras y hoy, en honor a su memoria y en solidaridad con los Hondureños, @CMICorporacion de nuevo se hace presente, apoyando a los hondureños afectados por el huracán ETA", escribía el empresario.
El 3 de octubre de 1974 fallecieron los empresarios guatemaltecos Dionisio Gutiérrez y Alfonso Bosch cuando iban en una avioneta a apoyar a las víctimas del huracán Fifi-Orlene en Honduras; la avioneta llevaba un cargamento con medicinas que habían sido recolectadas por el Club Rotario de Guatemala pero se estrelló por las condiciones climáticas y la carga cerca de la aldea Las Nubes. Los descendientes de los fallecidos, propietarios de empresas como Pollo Campero, Avícola Villalobos y Empacadora Toledo.
El Gobierno de El Salvador también se ha solidarizado con los hondureños, llevando paquetes de alimentos.
El valle de Sula, el más productivo y capital industrial de Honduras, estaba convertido en una enorme laguna al desbordarse los ríos Ulúa y Chamelecón. Las calles estaban cubiertas de agua y las casas parecían islas, desde donde algunas personas, que treparon al techo, pedían ser rescatadas.
La hondureña Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) dijo que las lluvias asociadas a Eta dejaron 338.563 personas afectadas, 2.764 evacuadas y 2.675 albergadas.
