Según The Seattle Times es una librería con 6.000 títulos. Entre los planes de la tecnológica está hacer un seguimiento de los clientes para saber qué títulos llaman más su atención y conocer mejor así los secretos para tener un inventario de éxito.
Jennifer Cast, vicepresidente de Amazon Books, cree que el lanzamiento de esta tienda física es fruto de la dilatada experiencia que tiene en el sector. "Hemos puesto los conocimientos adquiridos durante de 20 años vendiendo libros online en una tienda, de modo que se integran los beneficios de la compra en Internet y en el mundo físico", explica en el blog de la empresa.
Los libros expuestos se han elegido basándose en la valoración de los que lo han comprado ya por Internet, la cantidad de reservas previas al lanzamiento y la popularidad cosechada en Goodreads, una red social de lectores también de su propiedad. También cuentan con asesores que dan consejo.
Por años, los pequeños dueños de librerías lucharon contra los precios bajos de Amazon. Basados en las estadísticas de la firma, Amazon Books ofrecerá lo que otras librería no: usará información para escoger los títulos más atractivos para los habitantes de Seattle.
Esto resolvería el problema que por años ha afectado a otras librerías: los libros no vendidos que generan polvo en los estantes y tiene que ser devueltos a las casas editoriales. Con la inteligencia de Amazon que conoce patrones de consumo proveerá a las librerías sólo los títulos que tendrán alta probabilidad en moverse. Incluso hay categorías como: los libros más deseados para saber cocinar, los más premiados, los que tienen más estrellas, según los usuarios de Amazon.
Jennifer Cast, vice presidenta de Amazon Books, insiste que el uso de información es cuidadosamente cuidada: ¨Tomamos la data que tenemos y creamos un lugar físico para ella¨. Varios editores han pedido al Departamento de Justicia de Estados Unidos que se estudien las técnicas de Amazon en cuanto a precios, saltándose las recomendaciones de la industria con descuentos de hasta el 40%, publicó El País.
Deborah Bass, portavoz de Amazon, dijo a Cnet, que no tiene claro si este es el futuro de la empresa, pero que tienen grandes esperanzas en la tienda.
Aunque Amazon tiene máquinas expendedoras en aeropuertos, así como tiendas temporales en centros comerciales, este es su primer espacio permanente con el libro como protagonista.
