Por EUROPA PRESS
La compañía de comida rápida Yum! Brands, dueña de las cadenas de restaurantes Taco Bell, Pizza Hut y Kentucky Fried Chicken (KFC), obtuvo un beneficio neto de US$255 millones en el tercer trimestre de 2019, lo que equivale a un descenso del 44% con respecto al mismo periodo del año anterior.
El abultado descenso en el resultado neto se correspondió con los atípicos financieros. Mientras que en el tercer trimestre de 2019 la firma registró una ganancia financiera de US$96 millones, entre julio y septiembre de este año observó un impacto negativo de US$59 millones.
'Tras un primer semestre muy sólido y en línea con nuestras expectativas, los resultados del tercer trimestre han sido consistentes con nuestro modelo de crecimiento a largo plazo', ha apostillado el consejero delegado de Yum! Brands, Greg Creed.
La facturación de la firma en el tercer trimestre se contrajo un 4%, hasta US$1.339 millones. Los ingresos procedentes de los locales en propiedad descendieron un 27%, hasta US$364 millones, mientras que los originados por el pago de alquileres y tasas de franquicia crecieron un 7%, hasta US$645 millones. Los ingresos originados por la contribución de los locales franquiciados a la publicidad creció un 15%, hasta US$330 millones.
Con respecto a los gastos, la partida publicitaria de las franquicias y sus costes de servicios crecieron un 13%, hasta US$325 millones, mientras que los gastos de los restaurantes en propiedad descendieron un 27%, hasta US$292 millones. De su lado, los costes generales y administrativos avanzaron un 2%, hasta US$208 millones de dólares.
Las ventas de los 49.158 locales de las tres cadenas, incluyendo los franquiciados, se situaron en US$12.832 millones, lo que equivale a un incremento del 6%, mientras que excluyendo el efecto del tipo de cambio, el alza fue del 7%.
De esta forma, el beneficio neto de la compañía en los nueve primeros meses de 2019 cayó un 33%, hasta US$806 millones, tras un descenso del 5% de los ingresos, hasta US$3.903 millones.
La compañía de comida rápida Yum! Brands, dueña de las cadenas de restaurantes Taco Bell, Pizza Hut y Kentucky Fried Chicken (KFC), obtuvo un beneficio neto de US$255 millones en el tercer trimestre de 2019, lo que equivale a un descenso del 44% con respecto al mismo periodo del año anterior.
El abultado descenso en el resultado neto se correspondió con los atípicos financieros. Mientras que en el tercer trimestre de 2019 la firma registró una ganancia financiera de US$96 millones, entre julio y septiembre de este año observó un impacto negativo de US$59 millones.
'Tras un primer semestre muy sólido y en línea con nuestras expectativas, los resultados del tercer trimestre han sido consistentes con nuestro modelo de crecimiento a largo plazo', ha apostillado el consejero delegado de Yum! Brands, Greg Creed.
La facturación de la firma en el tercer trimestre se contrajo un 4%, hasta US$1.339 millones. Los ingresos procedentes de los locales en propiedad descendieron un 27%, hasta US$364 millones, mientras que los originados por el pago de alquileres y tasas de franquicia crecieron un 7%, hasta US$645 millones. Los ingresos originados por la contribución de los locales franquiciados a la publicidad creció un 15%, hasta US$330 millones.
Con respecto a los gastos, la partida publicitaria de las franquicias y sus costes de servicios crecieron un 13%, hasta US$325 millones, mientras que los gastos de los restaurantes en propiedad descendieron un 27%, hasta US$292 millones. De su lado, los costes generales y administrativos avanzaron un 2%, hasta US$208 millones de dólares.
Las ventas de los 49.158 locales de las tres cadenas, incluyendo los franquiciados, se situaron en US$12.832 millones, lo que equivale a un incremento del 6%, mientras que excluyendo el efecto del tipo de cambio, el alza fue del 7%.
De esta forma, el beneficio neto de la compañía en los nueve primeros meses de 2019 cayó un 33%, hasta US$806 millones, tras un descenso del 5% de los ingresos, hasta US$3.903 millones.
