A 1 de enero de 2017, 2,4 millones de españoles residían en el extranjero, principalmente en Europa (822.264 personas) y las Américas (1,5 millones), indicó el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El dato supone casi un millón más en comparación con el 1 de enero de 2009, cuando había 1,47 millones de españoles residiendo en el extranjero.
En 2016 específicamente, el incremento neto de inscritos fue de 101.581 personas, lo que significó un aumento de 4,4%.
Durante la crisis económica de 2008-2013, un período en el que el desempleo llegó a alcanzar el 27%, cientos de miles de personas emigraron al extranjero en busca de una vida mejor.
A pesar de un robusto crecimiento económico del 3,2% del PIB en 2016, la tendencia se mantuvo, aunque a un ritmo menor que en años anteriores, ya que en 2015 el número de residentes en el extranjero subió un 5,6%, en 2014 un 6,1% y en 2013 un 6,6%.
Tomando en cuenta el número de inscritos, el INE señala que casi 179.000 personas se registraron en el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE) en 2016.
De estas nuevas inscripciones, el 53,7% se realizaron en el continente americano, más de 96.000.
De ese total, más de 66.000 nacieron en el país en que ahora residen, de lo que se deduce que buena parte eran latinoamericanos con nacionalidad española que regresaron a su nación de origen.
Los países donde residían más españoles a 1 de enero de 2017 eran Argentina (448.050), Francia (243.582) y Venezuela (180.497).
En el caso de este país, sometido a una fuerte crisis política y económica, se redujo sin embargo el número de españoles en 7.528 respecto al año anterior, un 4% menos.
España tenía a 1 de julio de 2016 una población total de 46,468 millones, según el INE.
