<div id='DTElementID-23928523' class='WebText'><strong>Por Claudia Contreras/</strong> <strong>Ilustraciones: Luis Barahona (Garabatos)</strong>Con apenas tres d&eacute;cadas de vida, este joven m&eacute;dico destaca por su formaci&oacute;n de excelencia en cirug&iacute;a oncol&oacute;gica y su maestr&iacute;a en salud p&uacute;blica con enfoque en epidemiolog&iacute;a<strong>. Salvadore&ntilde;o de coraz&oacute;n, su sue&ntilde;o es retornar a su pa&iacute;s y aportar su experiencia en el campo de la medicina.</strong><strong>Roberto J Vidr&iacute; estudi&oacute; en la Universidad de Ciencias M&eacute;dicas (UCIMED) de San Jos&eacute;, Costa Rica.</strong> Fue el primer paso de una exitosa carrera como m&eacute;dico-cirujano en Centroam&eacute;rica y Estados Unidos.&quot;En el a&ntilde;o 2009 me mud&eacute; a Chicago a estudiar y completar los ex&aacute;menes necesarios para certificarme como m&eacute;dico en Estados Unidos; luego volv&iacute; a Costa Rica a completar mi a&ntilde;o de internado en el 2010. Tuve la suerte de ser aceptado como residente de cirug&iacute;a general en la Universidad de Brown en Providence, Rhode Island. <strong>All&iacute; estuve cinco a&ntilde;os, quiz&aacute;s los m&aacute;s dif&iacute;ciles en mi vida acad&eacute;mica, form&aacute;ndome al lado de algunos de los l&iacute;deres de la cirug&iacute;a acad&eacute;mica en Estados Unidos. Tambi&eacute;n fue all&iacute; adonde naci&oacute; mi pasi&oacute;n por la cirug&iacute;a oncol&oacute;gica (c&aacute;ncer) y la investigaci&oacute;n</strong>&quot;, comparte en entrevista.Al completar su formaci&oacute;n, cuenta, trabaj&oacute; como cirujano en un hospital en Maine mientras, al mismo tiempo, completaba una maestr&iacute;a de dos a&ntilde;os en salud p&uacute;blica con enfoque en epidemiolog&iacute;a y bioestad&iacute;stica en la Escuela de Salud P&uacute;blica &quot;T.H. Chan&quot; de la Universidad de Harvard.&quot;En agosto del 2020 me traslad&eacute; al Fox Chase Cancer Center en Philadelphia para dedicar un a&ntilde;o casi de lleno a la investigaci&oacute;n cl&iacute;nica y de servicios de salud; incluyendo un proyecto en el que analizaremos diferentes marcadores biol&oacute;gicos que puedan guiar el tratamiento de pacientes con c&aacute;ncer de p&aacute;ncreas. En agosto del a&ntilde;o 2021 me trasladar&eacute; a la Universidad de Wisconsin adonde completar&eacute; una subespecializaci&oacute;n de dos a&ntilde;os en cirug&iacute;a oncol&oacute;gica compleja&quot;, detall&oacute;.<strong>¿Qu&eacute; es lo m&aacute;s dif&iacute;cil de ser una voz cient&iacute;fica en tiempos de desinformaci&oacute;n? El doctor Vidr&iacute; responde sin dudar: &quot;Es frustrante ver como en medio de la crisis sanitaria m&aacute;s grande del siglo, se toman decisiones pol&iacute;ticas sin medir las consecuencias sociales</strong>. No se deber&iacute;a deslegitimar a los especialistas, a las voces sensatas y objetivas, para mantener la popularidad y el conflicto social. Sin embargo, esta es una crisis hist&oacute;rica y no podemos quedarnos de brazos cruzados. Debemos continuar, desde nuestras trincheras, combatiendo la desinformaci&oacute;n con datos, experiencia y an&aacute;lisis objetivos. Combatir cada dato err&oacute;neo con datos provenientes de estudios elaborados con metodolog&iacute;a aceptada y rigurosa&quot;.<strong>El doctor Vidr&iacute; siempre se plante&oacute; &quot;que sin importar adonde terminara en la vida, me formar&iacute;a en un sistema de salud en Centroam&eacute;rica, similar al de El Salvador&quot;. Ahora su objetivo &quot;Es poder incorporar las experiencias y relaciones que he ido cultivando en mi carrera con el desarrollo de El Salvador.</strong>Se pueden crear lazos importantes que lleven a mejorar nuestro sistema de salud y la educaci&oacute;n m&eacute;dica. Tambi&eacute;n, crear las bases de una cultura de investigaci&oacute;n y academia en nuestro sistema, comenzando en las universidades - esto va de la mano con el desarrollo en salud p&uacute;blica. Sin embargo, esto no puede ser un plan a mediano o corto plazo. Debe ser una visi&oacute;n a nivel de sociedad, comprometida a mantener el rumbo sin importar la alternancia pol&iacute;tica&quot;.<h2>Tres frases sobre El Salvador, su pa&iacute;s</h2><strong>1. Lo que m&aacute;s le inspira de El Salvador.</strong>Nuestra gente. El Salvador ha sufrido mucho en las &uacute;ltimas d&eacute;cadas - terremotos, huracanes, guerras. Agreguemos la falta casi generalizada de recursos que contribuyan al bienestar social, incluyendo las &aacute;reas de salud y educaci&oacute;n. A pesar de esto, el salvadore&ntilde;o es bueno, trabajador y est&aacute; lleno de esperanza.<strong>2.Volver a El Salvador</strong>&quot;Muchos de mis planes han ido cambiando con el tiempo, excepto uno: volver a El Salvador. Mi sue&ntilde;o es regresar y poder servir, a trav&eacute;s de mi educaci&oacute;n y experiencia, a todo aquel que lo necesite. Contribuir con el cambio de nuestro sistema de salud hacia uno m&aacute;s moderno, en la pr&aacute;ctica de medicina basada en evidencia y la educaci&oacute;n m&eacute;dica&quot;.<strong>3. Convocar a otros notables.</strong>Hay muchos salvadore&ntilde;os en el exterior que han triunfado en sus &aacute;reas - ciencia, educaci&oacute;n, salud. Tenemos que crear las condiciones para que regresen y, de la mano de los profesionales locales, sean parte de una generaci&oacute;n de &quot;cambio&quot;.</div>