Bill Gates, el cofundador multimillonario de Microsoft, acaba de reconocer que se ha comprado un auto eléctrico, pero no uno de la marca Tesla, a la que ha alabado públicamente por convencer a la industria automotriz de que apostara por los motores eléctricos.
Gates se ha decantado por un Taycan, una berlina 100% eléctrica de la marca alemana Porsche que ofrece 761 CV de potencia.
Gates habló con un influencer de YouTube la semana pasada sobre los desafíos de reducir las emisiones para frenar el cambio climático. Durante esa entrevista, aplaudió a la la industria del automóvil por ser uno de los sectores que más se está esforzando para lograrlo.
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'Y, ciertamente, Tesla, si tuvieras que nombrar a una compañía que ayudó a impulsar eso, son ellos', dijo Gates al youtuber Marques Brownlee.
Entonces Gates habló sobre su reciente adquisición de un Porsche Taycan. Si bien calificó el auto deportivo eléctrico como 'muy, muy bueno', reconoció su precio premium (los modelos Turbo S iniciales comienzan en US$185.000) y dijo que los consumidores aún tienen que superar sus preocupaciones sobre la autonomía y el tiempo de recarga de este tipo de coches.
Las palabras de Gates y, especialmente el hecho de que hubiera elegido un eléctrico alemán, levantaron ampollas.
Cuando un amante de Tesla publicó en Twitter que estaba contrariado por la decisión de Gates de comprar un Porsche en lugar de un Tesla y por sus comentarios sobre la preocupación por la autonomía de los coches eléctricos, Musk respondió: 'Mis conversaciones con Gates han sido decepcionantes'.
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Musk, de 48 años, no es ajeno a tuitear despectivamente sobre sus compañeros multimillonarios. El director ejecutivo de Tesla cuestionó la comprensión del CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, sobre los riesgos de inteligencia artificial en 2017. El año pasado, llamó a Jeff Bezos un imitador después de que el CEO de Amazon.com Inc. se embarcó en un proyecto de satélite de Internet que podría rivalizar con uno que Musk la compañía estrechamente controlada SpaceX está persiguiendo.
Los comentarios del CEO de Tesla sobre el Taycan de Porsche han sido de todo tipo. Después de criticar a la marca de autos deportivos alemana por usar la nomenclatura de un motor de combustión interna para la versión de gama alta de su primer vehículo eléctrico, tuiteó en septiembre que 'parece un buen auto'.
