El Banco Central de Nicaragua (BCN) debe explicar cómo se logró que la economía en 2014 creciera más que en 2013 con las actividades productivas y la tasa de empleo formal extremadamente desaceleradas, plantearon economistas, los que recordaron que estas dos variables han estado por años estrechamente relacionadas con el comportamiento anual del Producto Interno Bruto (PIB).
El pasado viernes el BCN informó que tras una actualización de datos se concluyó que la economía en 2014 creció 4,7%, mayor al 4,5% que dijo a principios de este mes el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la misma estimación que había hecho el Gobierno.
El director ejecutivo de la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), Juan Sebastián Chamorro, y el economista Adolfo Acevedo, así como un tercer especialista que prefirió el anonimato, se declararon "sorprendidos" por el dato final divulgado por el BCN, al recordar que durante casi todo el año el índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) y la tasa de creación de empleo formal se desaceleraron respecto a 2013.
Acevedo plantea, por ejemplo, que en el caso de la tasa del empleo formal y el comportamiento del PIB, "entre 2007 y 2013, existe una elevada correlación entre las dos variables, del orden del 96%. Pero en 2014, la correlación se reduce de manera significativa".
La contradicción
La creación de empleo creció 5,4% el año pasado, 2,6% menos que en 2013, pero el PIB en ese período repuntó una décima más. De ahí la contracción. "El número de afiliados activos del Seguro Social en lugar de acelerarse -como uno hubiera esperado si el valor de la correlación se hubiese mantenido tan alto como antes- experimentó su peor desaceleración desde la crisis internacional de 2009", enfatiza Acevedo.
"Esta desaceleración tan fuerte del crecimiento del empleo formal hubiese parecido menos sorprendente si, por ejemplo, la economía también hubiese aparecido desacelerándose y hubiese pasado, por ejemplo, de crecer del 4,6% en 2013, al 4,3% en 2014", ejemplifica.
Por su lado, Chamorro señala que debido a que el IMAE se mantuvo casi durante todo el 2014 desacelerado, Funides había proyectado un crecimiento de entre 4,2% y 4,5%.
"No tenemos más que una nota de prensa (hasta ayer) del BCN para explicar más a fondo a qué obedece este incremento repentino (del PIB), pero sí efectivamente no deberían estar muy distantes las dos variables", enfatiza.
"El IMAE bajó durante todo el 2014 y no fue sino hasta los últimos cuatro meses del año cuando empezó a repuntar, pero nunca llegó a estos niveles de 4,7%", precisa.
2014: año difícil
Chamorro además recuerda que el año pasado fue especialmente atípico por el terremoto en abril, que afectó gravemente el comercio en una de sus temporadas más elevadas, como fue Semana Santa, así como los daños en la siembra de primera por el fenómeno de El Niño, que trajo consigo sequía.
Por su parte, otro economista, quien prefirió el anonimato, indicó que otro elemento que llama la atención es que al término del 2014, según el BCN, la tasa de formación bruta de capital fijo creció 8%, cuando en el segundo y tercer trimestre hubo caídas de 4,8% y 8,1%.
El IV informe de Cuentas Nacionales Trimestrales, divulgado la tarde de ayer lunes, indica que en el último trimestre la tasa de formación bruta de capital, tras dos trimestres seguidos de caídas, repuntó 16,1%. "Este resultado fue producto del crecimiento del componente privado (14,1%) y del público (23,3%)", señala el informe.
Más contradicciones
Aun así, el especialista declara: "Igual, están surgiendo unos números fuertes en construcción y viviendas, y antes venía siendo reportado como un sector que estaba en contracción. Habrá que ver igualmente lo que pudo haber cambiado que explique estos giros que se observan".
La fuente expresó que lo que más le preocupa son las "inconsistencias" muy frecuentes en los datos del Banco Central de Nicaragua.
