Claves del día

Orestes Fintiklis, el empresario de 39 años que expulsó a Trump de Panamá

El nombre Trump fue literalmente arrancado esta semana del icónico edificio en la bahía de Panamá. El Trump Ocean Club es historia.

2018-03-07

Por estrategiaynegocios.net

Un agrio lío legal, riñas, peleas en los pasillos, intervenciones policiales y campañas de despestrigio marcaron el fin de la marca Trump en Panamá.

El responsable -en parte- de esta debacle es Orestes Fintiklis, un empresario chipriota de 39 años, que comenzó a sonar en Panamá el año pasado, tras afianzar la compra de 202 de las 369 unidades del hotel.

Fintiklis pagó US$25 millones por su parte en el proyecto inmobiliario, inversión que le dio la llave para convertirse en el propietario mayoritario de un hotel que comenzó a gestarse en 2006, un lujoso edificio con forma de vela que a la larga se convertiría en el edificio más alto de Latinoamérica.

'Cuando yo decido invertir en un proyecto siempre procuro desarrollar la mejor propiedad, con estándares cinco estrellas y en la mejor ubicación posible', dijo en 2006 el magnate y ahora presidente de Estados Unidos Donald Trump a Estrategia&Negocios.

Foto: Estrategia y Negocios

Trump hablaba de un nuevo proyecto inmobiliario en Centroamérica, era mayo de 2006 y su fama -como duro hombre de negocios- estaba más que consolidada. El magnate respondía las preguntas de un equipo de Estrategia&Negocios que le entrevistó en Nueva York para conocer de su incursión en el negocio inmobiliario de la región.

En ese momento, la Trump Ocean Club International Hotel & Tower Panama era solo un proyecto concebido para desarrollarse en Punta Pacífica, un plano del que sería un un imponente edificio de 65 pisos, valorado en US$220 millones.

El proyecto con el sello de la Trump Organization se desarrollaría con socios locales, específicamente con el empresario Roger Khalif, presidente de Grupo K.

Foto: Estrategia y Negocios

En 2006, Khalif hablaba de sus proyectos como Coronado Country Club, un desarrollo conformado por 300 apartamentos y villas, pero también del proyecto en la isla de Contadora, ambos en el Pacífico panameño y de cómo hizo clic con Trump.

'Después del evento Miss Universo (2003) le envié una carta hablándole del país. En ese momento yo ya tenía el terreno', destacó el empresario quien manifestó que en octubre de de 2005 comenzó a florecer una relación de negocios más cercana.

'Al radar de Donald ya estaban llegando cosas de Panamá y nos pusimos en contacto', dijo Khalif quien reveleó además que la encargada de hacer la investigación para el negocio fue Ivanka, la hija y mano derecha del empresario y actual presidente estadounidense.

Foto: Estrategia y Negocios


¿Quién es Orestes Fintiklis?

Nacido en Chipre, Orestes Fintiklis, es un empresario afincado en el sur de la florida. Dirige a Ithaca Capital Partners, su empresa de inversiones a través de la que logró el control de la torre en Panamá.

De acuerdo con un artículo de The New York times, Fintiklis sirvió como funcionario en el ejército de ese país antes de estudiar derecho en la Universidad de Oxford.

En una carta con la leyenda "Privado y confidencial" dirigida a los otros propietarios del hotel este año, Fintiklis comparó a los Trump con sanguijuelas que se habían aferrado a la propiedad y "están drenando" las últimas gotas de sangre del hotel, de acuerdo con una copia a la que tuvo acceso The New York Times. También ha interpuesto demandas en las que acusa al negocio familiar de los Trump y a la Organización Trump de mala gestión del hotel.

La ardua batalla entre la Organización Trump e Ithaca comenzó el año pasado, cuando el fondo de inversión adquirió el complejo y decidió despedir al emporio del mandatario estadounidense de la administración del mismo.

Ithaca prescindió de la Organización Trump por presuntas malas prácticas financieras, pero el conglomerado impugnó el despido en un tribunal de Nueva York, que sigue dirimiendo el caso.

Según la prensa estadounidense, la Organización Trump, que nunca ha sido dueña del edificio, firmó hace una década un contrato con el desarrollador del proyecto para administrar la torre hasta al menos 2031.

'Hoy Panamá ha demostrado tener instituciones estables, seguridad jurídica y un marco legal respetuoso con los inversionistas. Hoy cada uno de los inversionistas internacionales que han invertido en este país deben sentirse seguros', dijo Fintiklis a periodistas en una conferencia de prensa después de que empleados del proyecto retiraran la palabra Trump del edificio.

Las cinco letras plateadas de Trump fueron arrancadas a punta de martillazos de la pared de granito, un emblema que habitualmente era fotografiado cientos de turistas de paso por Panamá.

Foto: Estrategia y Negocios


Operativo para sacar a TrumpLos Trump dicen que aceptaron la transacción con la condición de que Fintiklis no interfiriera con su gestión del hotel.

Cuando se completó la compra en agosto, la asociación entre Trump y Fintiklis parecía prometedora. El chipriota dijo que el hotel era una "propiedad icónica" y que ansiaba trabajar con los Trump.

Su campaña comenzó en serio en octubre: organizó una reunión con los titulares de unidad -los Trump dicen que de manera engañosa dijo que la sesión sería una convivencia social- y se hizo una votación para declarar un incumplimiento por parte de los Trump en su acuerdo administrativo. Poco después, la disputa llegó al sistema legal y Fintiklis buscó mediación para retirar a la ahora familia presidencial.

Los Trump dicen que la naturaleza inmediata de los esfuerzos legales de Fintiklis demuestran que jamás tuvo la intención de cooperar y que había estado planeando un ataque desde el inicio.

Regodeándose en sus críticas, dijo en un documento presentado ante el tribunal que una "pésima gestión" del hotel junto con "violaciones materiales" del contrato de administración y las obligaciones fiduciarias habían hecho que las ganancias se desplomaran y el estado del edificio se deteriorara. "El hotel prácticamente ha estado vacío", se mencionó en el documento, una afirmación que los Trump niegan.

Representantes del Juzgado Segundo del Circuito Civil de Panamá se presentaron cerca de las 11:00 de la mañana del pasado lunes al lobby del edificio, ubicado en uno de los barrios más ricos de la capital pañameña, las autoridades judiciales fueron acompañadas de 15 agentes de la policía y su misió era notificar a los empleados de Trump que tenían que irse y abandonar la gestión del proyecto.

'Como se han dado cuenta, esto es una mera batalla comercial que simplemente se ha salido de control. Hoy esta disputa se ha solucionado gracias a que los jueces han enviado a las autoridades del país', dijo a los periodistas Orestes Fintiklis.

'Hoy Panamá ha demostrado tener instituciones estables, seguridad jurídica y un marco legal respetuoso con los inversionistas. Hoy cada uno de los inversionistas internacionales que han invertido en este país deben sentirse seguros (...) Hoy declaro que Panamá me ha hecho sentir orgulloso y anuncio públicamente que iniciaré los trámites para obtener la ciudadanía y el pasaporte panameños', aseguró el empresario chipriota, quien tras comparecer ante los periodistas se dispuso a tocar una canción tradicional griega en el piano que se encuentra en el lobby del hotel.

Orestes Fintiklis, managing partner de Ithaca Capital Partners. REUTERS/Carlos Lemos

La Organización Trump, sin embargo, negó horas después en un comunicado difundido en Panamá haber perdido definitivamente el control del hotel y dijo que 'deberá ser indemnizado por daños y perjuicios, costas y otros gastos producto de las acciones tomadas'.

'Que quede absolutamente claro que a la fecha de hoy no se ha decidido absolutamente nada por ningún tribunal de justicia, ya sea ordinario o de arbitraje, donde se haya puesto fin a nuestro contrato de administración del hotel', añadió el grupo empresarial.

La Organización Trump también acusó a Fintiklis de usar "tácticas mafiosas" en su intento de entrar a la fuerza a las oficinas administrativas del hotel, lo cual provocó altercados físicos y verbales, y de involucrarse en una "conspiración fraudulenta" para quitar a la propiedad la gestión y la marca Trump. Las críticas que Fintiklis ha hecho a la administración de la empresa "son un fraude y una calumnia total", dijo esta misma en un documento del tribunal.

El pasado 26 de febrero, el Ministerio Público de Panamá anunció que investiga si hubo una "conducta reprochable" en la disputa, lo cual significa que una rama de un gobierno extranjero se encuentra en la posición extraordinaria de investigar un negocio que es propiedad del presidente estadounidense.

Hace tan solo siete años, en la inauguración del hotel, el presidente de Panamá en ese entonces, Ricardo Martinelli, exaltó la propiedad junto a Trump. La ciudad de Panamá en esa época estaba repleta de inversionistas internacionales y su economía estaba en auge, por lo que se ganó el apodo de la "Dubái de Latinoamérica".

Foto: Estrategia y Negocios

Un negocio a cargo de los hijos de Trump

Según NYT, Alan Garten, el principal funcionario legal de la Organización Trump, dijo que el mandatario estadounidense no estaba involucrado en la disputa actual. "Esto no tiene absolutamente nada que ver con el presidente de Estados Unidos", dijo. "Es una disputa exclusivamente comercial", y agregó que "obviamente, la situación recibe más atención esta vez".

El presidente sigue siendo propietario de la empresa a través de un fideicomiso, pero les ha delegado la gestión cotidiana a sus hijos mayores, Donald Jr. y Eric.

La desventura panameña se ha convertido en el dolor de cabeza más grande del negocio familiar en una época en que su fundador está en la Casa Blanca, y cada decisión y problema se magnifica en todo el mundo. El negocio también está dando otras señales de reducirse: la Organización Trump hace poco aceptó acuerdos para eliminar el nombre de Trump de propiedades alguna vez atesoradas en Nueva York y Toronto.

A diferencia de los hoteles de la marca Trump en Toronto y en Nueva York, cuyos propietarios y el equipo de Trump negociaron una partida silenciosa y una compensación para la Organización Trump, la disputa sobre el inmueble en Panamá tiene el sabor de una derrota pública.

Algerd Monstavicius, un médico jubilado del estado de Nevada que es dueño de un pent-house, está a favor de un cambio en la administración y citó la problemática que enfrenta la marca Trump en Latinoamérica.

"Trump tiene su apellido en casi casa parte del hotel, desde en las puertas hasta en la pasta de dientes", escribió Monstavicius a un periodista de The Associated Press. "Todo lo que dice y hace en cuanto a inmigración tendrá un impacto en mi ingreso de renta", explicó.

Foto: Estrategia y Negocios

Monstavicius dijo que su unidad habitacional se rentaba por US$1.200 la noche, pero indicó que recientemente la habían alquilado por tres días a US$118 la noche.

Las autoridades panameñas tratan de minimizar la disputa en el hotel. Los funcionarios del Ministerio del Trabajo se aseguraron de que los empleados no tuvieran sueldos pendientes. Por su parte, los funcionarios del sector turístico buscan restarle importancia a la mala publicidad.

"Este es un tema privado de la administración", dijo Armando Rodríguez, presidente de la asociación hotelera de Panamá. "Esto no afecta el turismo panameño porque la industria turística es mucho más que esto".

Robert Eisenmann, un importante empresario panameño, también restó importancia a la disputa. "Hay muchos hoteles de lujo donde puedes hospedarte sin necesidad de pasar por estos problemas", destacó.

Con información de archivo E&N, DW, NYT, Agencias y La Estrella de Panamá.

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